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La Parroquia, el lugar milenario que sirve el café como debe ser

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La Parroquia es uno de los sitios más emblemáticos de México, es el café más antiguo del país. Y como su nombre lo indica, se encuentra ubicado en el cálido puerto de Veracruz.

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¿Cómo surgió?

Su historia empezó de una manera muy distinta cuando en 1808 abrió sus puertas como una tienda de abarrotes y vinatería. Con el tiempo, decidieron comenzar a vender café, una deliciosa sustancia muy poco común para la época. Al pasar los años se convirtió en la única cafetería con el verdadero sabor de Veracruz y el primer establecimiento con luz de gas en el puerto.

Pero aparte de su delicioso café, este lugar es famoso por las personalidades que lo han visitado. Figuras como el presidente Echeverría, el cantautor Agustín Lara. Hasta el príncipe Carlos de Inglaterra y el comediante Cantinflas, probaron su especialidad; el popular café lechero. De hecho, el escritor Carlos Fuentes, Octavio Paz y Germán Dehesa, fueron comensales frecuentes.

El café lechero, una tradición de La Parroquia

El café lechero consiste en servir la leche caliente. Pero para poder obtenerla se debe tintinar la cuchara con tu vaso. Esta acción es toda una tradición que data de inicios de 1890. Y nació cuando los choferes de los tranvías del puerto de Veracruz hacían sonar la campana del transporte para “pedir” al mesero, su café con leche.

La Parroquia
FOTOS: LA PARROQUIA DE VERACRUZ

Los actuales dueños, la familia Fernández, son propietarios de Gran Café de la Parroquia desde 1926 y han preservado la celebración del café desde entonces. Si bien su fuerte es el pan y el café, el menú también incluye otros alimentos, fusión de la comida cubana con la española.

Si no pasas a La Parroquia no fuiste a Veracruz

Por otro lado, los habitantes de Veracruz saben que al menos una vez en su vida tienen que ir a este lugar. Hasta el momento, no hay veracruzano que no haya ido y que no recomiende ampliamente sus sabores. Según algunos números diariamente el lugar atiende por la mañana a 3 mil 500 comensales y por más de ocho décadas, este número ha ido en aumento.