El tequila al rescate de los murciélagos en peligro de extinción

El tequila, además de satisfacer tu paladar y tener el súper poder de convertirte en el mejor bailarín de la fiesta. Tiene otras funciones, como alimentar a diversas especies con su néctar de agave en flor.

¿Te lo perdiste? “Chile Chilhuacle, un sabor milenario que lucha por sobrevivir”

Una especie que genera vida

Ejemplo de esto son los murciélagos, una especie que juega un papel vital para la producción de bebidas embriagantes. Pues el agave al ser una planta que sólo abre de noche, puede ser polinizada únicamente por estos animales de la oscuridad.

Pero es un dando y dando. Ya que, si él se alimenta, dispersa las semillas y el polen de la planta permitiendo que ésta se propague y se desarrolle. En resumen, es una relación mutuamente beneficiosa.

Sin embargo, en los últimos años esta especie estaba en la lista de especies en peligro de extinción. Según informes del Servicio de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos, en 1988 había menos de mil ejemplares.

Pero, ¿por qué pasó a ser una especie en peligro?

La razón de su declive se debió a la expansión de diversas zonas comerciales y residenciales en territorios magueyeros. Las grandes construcciones fueron avanzando, y se llevaron consigo miles de plantíos de agave que alimentaban a los murciélagos. Además, de las prácticas desmedidas de cultivo no naturales.

Arreglos que salvan al mundo

Por lo tanto, a través de varias campañas se hizo un convenio con los productores para que el cultivo del maguey fuera más consciente. Se dejaron crecer algunas plantas para que florecieran y así, produjeran semillas que alimentaran a estas especies. Pues debido a la alta demanda de producción, la mayoría de las empresas cortaban los agaves con alto contenido de azúcar antes de que se desarrollaran por completo.

Ahora vuelven a ser parte de la ecuación

Después el esfuerzo hecho por ambas partes, el mismo organismo de Vida Silvestre de Estados Unidos declaro que al día de hoy, el total de murciélagos suma más de 200 mil especies. Resultado que se dio a partir de un trabajo en conjunto con dependencias oficiales, ambientalistas y productores mexicanos y estadounidenses.

Esperemos que el acuerdo se mantenga igual de benéfico y se regulen con más detalle las prácticas agrícolas que puedan llegar a deteriorar el medio ambiente.

FOTO PRINCIPAL: DGCS UNAM