Económico y más popular de lo que piensas
Así es, quizás seas un amante de este platillo o quizás no, pero quiero contarte, que esta preparación es mucho más común de lo que te imaginas.
Y es que, a pesar de que el pollo es la proteína más consumida en el día a día de los mexicanos, muchas veces olvidamos las vísceras.
A pesar de que no son las más populares, son ricas en nutrientes.
Entre las menudencias del pollo se encuentran el corazón, mollejas e hígado, principalmente.
A demás, el hígado, preparado de diferentes maneras, es una opción fácil y sobre todo económica para salir de un apuro.
Aquí te dejamos la receta del hígado encebollado
Hígado encebollado
Ingredientes:
- 500 gramos de hígado (de res, cerdo o pollo)
- 2 cebollas grandes, cortadas en julianas
- 2 dientes de ajo, picados finamente
- 2 cucharadas de aceite de cocina
- 1 cucharadita de comino en polvo (opcional)
- Sal y pimienta al gusto
- Limón (opcional, para marinar el hígado)
Instrucciones:
- Si deseas, puedes marinar el hígado en jugo de limón durante unos 30 minutos antes de cocinarlo. Esto puede ayudar a reducir el sabor fuerte del hígado. Después de marinar, escurre el exceso de limón y seca el hígado con papel de cocina.
- En una sartén grande, calienta el aceite a fuego medio. Agrega el ajo picado y saltea durante unos minutos hasta que esté fragante.
- Agrega las cebollas en julianas a la sartén y cocina a fuego medio-bajo durante unos 10-15 minutos o hasta que estén caramelizadas y doradas. Revuelve ocasionalmente para evitar que se quemen.
- Mientras las cebollas se cocinan, corta el hígado en trozos pequeños y sazónalos con sal, pimienta y comino en polvo, si lo deseas.
- Cuando las cebollas estén caramelizadas, retíralas de la sartén y resérvalas.
- En la misma sartén, agrega un poco más de aceite si es necesario y caliéntalo.
- Luego, agrega los trozos de hígado y cocina durante unos minutos a fuego medio-alto hasta que estén cocidos por fuera pero aún ligeramente rosados por dentro.
- El tiempo de cocción dependerá del grosor de los trozos de hígado, así que asegúrate de no cocinarlos demasiado para que no queden secos.
- Una vez que el hígado esté cocido, vuelve a agregar las cebollas caramelizadas a la sartén y mezcla todo junto durante unos minutos para que los sabores se combinen.
- Sirve caliente y disfruta tu hígado encebollado. Puedes acompañarlo con arroz, puré de papas o tortillas, según tus preferencias.
¡Buen provecho!