Comestible, colorido y silvestre, así es el hongo azul mexicano

México es tierra de hongos. Somos uno de los países que tiene más especies culinarias y espirituales del reino fungi. Sin embargo, hay uno que la mayoría no sabe de su existencia, ni mucho menos, del gran sabor que guarda: el hongo azul.

Tan sólo en nuestro país se calcula que existen alrededor de 200 mil especies, pero solamente se han registrado 6 mil. Lo que nos indica que el conocimiento nacional en este reino es mínimo.

¿Te lo perdiste? ‘Los tumbagones, el dulce sabor de la fidelidad’

El raro hongo azul

El hongo azul es una especie rara que no sólo es peculiar por su color, sino por su difícil localización. En algunas partes de México se le conoce como hongo añil, oreja de puerco, zuin o quexque. Y su copa o sombrero puede llegar a medir hasta 10 cm de diámetro.

Cabe mencionar, que cuando son jóvenes, su particular color azul es más intenso. Y, a medida que van envejeciendo, se degrada hasta llegar a un gris pálido.

Hongos silvestres

Esta especie crece y se resguarda especialmente en el Bosque de los Hongos Azules, en Cuernavaca. Además de ser una increíble opción para disfrutar de la naturaleza, es un lugar recuperado y liderado por la propia comunidad de mujeres de Santa María Ahuacatiltá. Ellas tienen como objetivo reducir la mancha urbana que existe en esta zona del país.

El papel que los hongos azules tienen para este bosque es de suma importancia. Recordemos que ayudan a mantener la salud de los bosques a través de la simbiosis, proceso que estimula su crecimiento.

¡Disfruta su sabor!

Existen distintas maneras de prepararlos. Pueden ser cocinados al carbón o salteándolos en aceite o manteca de cerdo. Si quieres experimentar, puedes agregarles cebolla, ajo y epazote con una salsa bien picosa en un taco.

Eso sí, si vas a comprar hongo azul, hazlo de una manera consciente que no dañe al medio ambiente y con toda legalidad.

Foto principal: Naturalista