¿Alguna vez probaste el refresco “Soldado de Chocolate”?

Si eres de Yucatán o has viajado a esa hermosa península, seguramente llegaste a escuchar o tal vez probar el famoso “Soldado de Chocolate”. Si quieres conocer más acerca de este refresco mexicano, ¡aquí te contamos!

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Un símbolo de identidad e historia

En la ciudad de Mérida el famoso refresco “Soldado de Chocolate” y la embotelladora que le dio vida son consideradas un símbolo de la identidad histórica local.

Los refrescos de la embotelladora nacieron, gracias al capitán José María Pino Rusconni. Al mezclar cáscaras de plátano, vainilla y algunas frutas para preparar una refrescante bebida para su larga travesía marítima. Desde el Archipiélago Canario hasta la Península de Yucatán.

Con la llegada del capitán a tierras yucatecas se enamoró no sólo de nuestro país, sino también de una bella joven que lo hizo quedarse. Y en 1885, comienza la historia de la Embotelladora de Refrescos Pino y la comercialización de sus productos en tiendas de Yucatán y Campeche.

Esta fue la primera embotelladora de la región. Y se dedicó a comercializar diferentes bebidas como sidra y agua mineral. Para la década de los cincuenta, la empresa se expandió hasta los Estados Unidos y empezó la historia del “Soldado de Chocolate”.

A partir de ese momento la bebida, tal cual la conocemos, empezó a producirse. Esta era una mezcla de leche en polvo, malta, cocoa, azúcar y chocolate. Además venía en otros sabores… ¡vainilla y fresa!

¡Adiós a un legado!

Con el paso de los años, la Embotelladora de Refrescos Pino fue teniendo más competencia como el refresco Coca-Cola -se cuenta que a la gente no le gustaba a pesar del parecido con alguno de sus productos- y vendieron la empresa a Halim Gáber.

Este empresario de origen libanés fue propietario de la embotelladora durante muchos años. Hasta que, en 2011 por falta de recursos se vieron forzados a cerrar sus puertas por no poder pagar la nómina de sus vendedores.

Aunque la empresa está en bancarrota, han empezado un proceso de rescate. Ojalá podamos volver a ver este refresco y probar su delicioso sabor.

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