La historia de Raúl Héctor Castro es singular. Un migrante mexicano que se convirtió en gobernador de Arizona. Suena poco probable en tiempos de Donald Trump, pero así es como sucedió.
Raúl H. Castro nació en Cananea, Sonora, el 12 de junio de 1916 y, como muchos mexicanos, emigró a Estados Unidos en busca de un mejor futuro cuando apenas tenía 10 años de edad.
Su padre falleció en 1928, dos años después de haber migrado. Castro fue el penúltimo de una familia con 12 hijos. Sin embargo, éste supo sobreponerse a las adversidades.
Su lucha en territorio americano
Consiguió forjarse un camino. Durante su juventud en la comunidad fronteriza de Douglas, trabajó en distintos oficios para ayudar a su familia. Más tarde consiguió ingresar a estudiar al Arizona State Teachers College de Flagstaff, donde se graduó en 1939.
Tras graduarse volvió a México para trabajar como empleado del servicio exterior en el consulado de Agua Prieta, en Sonora. No obstante, Castro tenía una meta fija: se convertiría en abogado.
Castro volvió a Estados Unidos para inscribirse en el Colegio de Leyes de la Universidad de Arizona. Ahí obtuvo el título de Doctor en Derecho en 1949. Hasta aquí, la historia de superación de Raúl era parecida a la de miles de inmigrantes en EEUU. Sin embargo, Castro tenía metas más ambiciosas.
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En 1958 se convirtió en juez de la Corte Superior del Condado de Pima. Para 1964 su reputación había crecido y el presidente Lyndon Johnson lo nombró embajador de Estados Unidos en El Salvador.
Más tarde fungió en el mismo cargo pero esta vez en Bolivia, donde estuvo hasta el final de 1969, cuando decidió especializarse en derecho internacional en Tucson. Cabe mencionar que Castro forjó una importante carrera política en las filas del Partido Demócrata.
El triunfo electoral
En 1970, Raúl Héctor Castro fue elegido como el candidato demócrata para la gubernatura de Arizona y perdió las elecciones frente al republicano Jack Williams. Sin embargo, en 1974, se postuló nuevamente, y esta vez Castro demostró sus dotes políticos durante la campaña.
Supo ganarse a los republicanos y al mismo tiempo mantener un discurso que atrajera a los liberales. Aunque Castro tenía posturas más bien conservadoras, se benefició de la agitación que estaba creciendo en el estado. Activistas como César Chávez lideraban a los latinos en Arizona y le otorgaron el impulso suficiente para lograr la gubernatura en 1974.
Raúl Héctor Castro fungió como gobernador de 1975 a 1977, cuando el presidente Jimmy Carter decidió enviarlo como embajador a Argentina, puesto en el que se mantuvo hasta 1980.
La victoria de Castro es un hecho histórico, desde su triunfo en 1974 ningún latino ha ocupado un cargo público estatal en Arizona. En la actualidad este estado se caracteriza por sus políticas antiinmigrantes.
Foto destacada: USA Today
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