Aún nos falta mucho por hacer, pero vamos en el camino correcto. Ya somos más los que levantamos las heces de nuestras mascotas cuando los sacamos a pasear, desafortunadamente las bolsas con las que recogemos están afectando el medio ambiente.
Las bolsas de compras de supermercados, de tiendas y de un sinfín de productos que consumimos a diario tardan unos 400 años en degradarse y derivan del petróleo, un recurso natural no renovable. Es por ello que existen campañas por todo el mundo para reducir su uso y promover las bolsas biodegradables, elaboradas con materiales que, al desecharse, comienzan a descomponerse por la acción de los microorganismos. Se convierten en materia orgánica, dióxido de carbono, agua y otras sustancias que pueden ser reutilizadas en la naturaleza.
Beneficios de las bolsas biodegradables
- Constituyen una alternativa para proteger el medio ambiente y un medio para evitar el colapso de los rellenos sanitarios y la contaminación de ríos, playas y mares.
- Las bolsas biodegradables, a diferencia de las convencionales cuentan con un aditivo especial de última generación denominado TDPA (Totally Degradable Plastic Additives), el cual les permite, una vez desechadas y después de aproximadamente un año, que comiencen su proceso de degradación, fragmentándose en pedazos cada vez más pequeños, haciendo posible que microorganismos como hongos o bacterias se alimenten del material de la bolsa convirtiéndolo en agua, biomasa (humus), sales minerales y dióxido de carbono, como el que exhalamos al respirar.
- Las bolsas biodegradables mantienen las mismas características que una tradicional y se pueden reutilizar para levantar las heces de tu mascota, así como en casa para propósitos domésticos.
¿Por qué usarlas?
- Reducen la contaminación de ríos, playas y calles.
- Evitan que peces, aves y otros animales mueran al ingerirlas.
- Alargan la vida útil de los rellenos sanitarios.
- Crean conciencia ambiental en la comunidad.
- Aportan un importante paso para reducir la contaminación ambiental.