Plaza de Alas: arte y naturaleza en un mismo lugar

La Plaza de Alas, a tan solo unos minutos de La Marquesa; es uno de los sitios más fotografiados de México

Visible desde la autopista y a tan solo 5 minutos de La Marquesa; la Plaza de Alas es uno de los puntos más visitados del Estado de México. En este lugar, las fotos son casi una obligación; pues nadie se pierde la oportunidad de encajar tan bien en una obra de arte como la que aquí se encuentra.

La mayoría de las personas que visitan esta plaza llegan aquí por casualidad; pues la enorme escultura llama la atención de quienes gustan de mirar por la ventana al ir en la carretera. Aun así, muchos de los visitantes quedan encantados con las fotos y las actividades; por lo que no es raro que lo recomienden o que quieran volver.

La obra que le da nombre a la plaza, en realidad, es un conjunto de esculturas que representan tres pares de alas surgiendo del suelo de la plaza. Cada par se encuentra a una altura distinta; como si fueran extendiéndose para emprender el vuelo. En el centro queda un espacio lo suficientemente grande como para que una persona se coloque entre los pares de alas. El tamaño de las esculturas y la amplitud del lugar permiten jugar con los ángulos y la perspectiva de las fotografías.

Esta obra fue realizada completamente en bronce por el escultor Jorge Marín. Fueron colocadas debido a un proyecto que se realizó para llenar de esculturas y fomentar el arte en el Estado de México. Según el propio Marín, las alas representan la libertad. Cada pieza mide diez metros y pesa alrededor de una tonelada.

En frente de la Plaza de Alas, y constituyendo el complemento perfecto para tener una vista digna de fotografiar; se encuentra la Laguna de Salazar. En los alrededores se colocaron bancas, mesas, asadores y hasta se puede pasear a caballo; pues la idea es que los visitantes pasen un buen rato al aire libre.

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