Las salineras o salinas son lugares en donde se deja evaporar agua salada. Al momento de este cambio físico queda solamente sal.
Y por si no estabas enterado, nuestro país ocupa el sexto lugar a nivel mundial en producción de sal. Pero lo que seguro no conoces es la belleza que nos brindan estos paisajes salinos.
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La salinera más grande del mundo
En la laguna Ojo Liebre se encuentra Guerrero Negro, una salina que se ubica en el estado de Baja California Sur y es ¡la más grande en el mundo!
Esta salinera cuenta con una producción de 7 millones de toneladas y con más de 33 mil hectáreas. Incluso, la sal que se produce en este lugar puede ser confundida con nieve ¿te lo imaginas?
Entre blancos y rosas, el paisaje de Guerrero Negro es mágico. Ya que no solo vislumbras una gran variedad de colores que convierten el horizonte y el cielo en uno mismo. También, durante la temporada invernal puedes apreciar el espectáculo que nos regalan las ballenas grises.
Este lugar es tan importante que el gobierno lo ha declarado como un santuario y la UNESCO lo nombró Patrimonio de la Humanidad.
Salinas prehispánicas en la Sierra Mixteca
En la Reserva de la Biósfera Tehuacán-Cuicatlán en Puebla, se encuentra una de las salineras prehispánicas más importantes del país, Zapotitlán Salinas.
Conservando aún sus prácticas ancestrales, en el cerro Cuthá se halla este paraíso salino. En este lugar aún se trabaja como se hizo en la época prehispánica y es uno de los pocos lugares en México donde la sal se extrae de cuencas endorreicas.
Esto quiere decir que el agua con la que se produce este mineral no proviene del océano, sino de la lluvia. Además, en este municipio poblano se encuentran varias zonas arqueológicas. Por esta razón, ir a esta salinera es todo un viaje en el tiempo.
Paisaje surrealista en Las Coloradas
Desde hace un par de años Las Coloradas se ha convertido en un paisaje mexicano. Ha sido reconocido mundialmente por su agua color rosa y su hermoso cielo turquesa.
Este lugar es una de las principales salineras del estado de Yucatán y una de las más grandes del país.
Como es una reserva especial de la biósfera, todos los métodos de obtención de sal se llevan a cabo en total sintonía con el medio ambiente y con tecnología de primer nivel.
Este fue uno de los sitios donde los mayas, bajo el nombre de “Emal”, produjeron grandes cantidades de este mineral que se comercializó en Centroamérica.
Sin lugar a dudas, México nos brinda paisajes de ensueño que muestran la riqueza cultural, natural y el trabajo de su gente.