El especialista del Instituto Politécnico Nacional (IPN), Celestino Odín Rodríguez Nava, descubrió diversos tipos de hongos que purifican en seis horas el agua contaminada por fármacos.
En un comunicado, informó que con este hallazgo, la presencia de fármacos en aguas residuales y suelos podría dejar de ser un problema de contaminación emergente, a partir de algunas especies de hongos, de los cuales obtuvo enzimas capaces de degradarlos en dicho tiempo.
Explicó que como parte del proyecto, colectaron 40 especies de hongos basidiomicetos, algunas comestibles, en el municipio de Santa Ana Jilotzingo, Estado de México.
El catedrático de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB) agregó que hasta el momento han identificado 10 cepas que producen enzimas con poder oxidativo capaz de degradar contaminantes.
Informó que con esta investigación obtendrá el grado de doctor en Biotecnología, y la misma se centra en la búsqueda de compuestos naturales que puedan implementarse en los sistemas de tratamiento para eliminar los medicamentos que se encuentran en nano y microgramos.
“Esas evidencias son una alerta para evitar que los fármacos sigan llegando al ambiente. Los estudios científicos indican los efectos tóxicos sobre especies bioindicadoras, por ello es momento de actuar para impedir que se afecten los diferentes niveles de las cadenas alimenticias de los ecosistemas”, agregó.
Resaltó que en las aguas residuales hay una amplia gama de contaminantes emergentes, entre ellos destacan los analgésicos, antiinflamatorios, antibióticos, reguladores de lípidos, hormonas, cafeína, e incluso drogas ilícitas.
“La investigación se enfocó a analizar cinco fármacos de uso común que son tóxicos para especies bioindicadoras y recalcitrantes en plantas de tratamiento, así que probaron la remoción de bezafibrato, gemfibrozil, indometacina, sulfametoxazol y diclofenaco”, detalló.
Para degradar los fármacos los científicos inicialmente probaron un producto comercial, pero no obtuvieron el resultado que esperaban.
Por ello, se experimentó directamente con los hongos Pleurotus sp., Pycnoporus sanguineus y Trametes máxima, éste último fue el que eliminó un mayor porcentaje de medicamentos.
Rodríguez Nava destacó que los fármacos se encuentran en las aguas residuales municipales, desafortunadamente la cobertura del tratamiento es cerca de 50 por ciento y no son eficientes en la eliminación de los fármacos.
En ese sentido, el hallazgo que realizó se traduce en el compromiso de encontrar una tecnología para remover contaminantes como los fármacos mediante las enzimas oxidasas y peroxidasas para implementarla en los sistemas de tratamiento.
“La generación de reactores biocatalíticos son una buena alternativa para lograr el objetivo”, apuntó.
El proyecto contó con la colaboración de los investigadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Unidad Iztapalapa, Octavio Loera e Ignacio González Martínez, y posteriormente se publicarán los resultados mediante un artículo científico, puntualizó.