Dos leyendas sobre el origen de la flor de Nochebuena

La flor de nochebuena además de ser la flor por excelencia de la Navidad, es muy hermosa. Y cuenta con dos leyendas que pocos mexicanos conocen.

Un regalo para Jesús

La primera leyenda cuenta que hace mucho tiempo en un pequeño pueblo de México, la gente se reunía cada año en la iglesia. Ahí dejaban algún regalo o presente a Jesús.

Todos los habitantes llegaban con cestas de fruta, ropa, juguetes, y grandes ofrendas de comida, entre otros. Pero así como pasaban los años, un niño se ponía triste por no tener nada que ofrecer. Pues la situación económica de su familia no se lo permitía.

Tras no poder dar nada, se escondió en un rincón de la iglesia y comenzó a llorar. Pero así como sus lágrimas caían al suelo, una hermosa flor con pétalos rojos comenzó a brotar.

Pablo comprendió que esa pequeña y hermosa flor roja era un regalo de Dios. Por lo que el pequeño fue a depositarla junto con los otros regalos.

El resto de las personas al observar esa bella flor, decidieron llevar una idéntica cada año. De esta manera, nació tan hermosa tradición.

Chécate esto: ‘Invernadero San Marcos y sus bonitas nochebuenas #DateElRol’

La flor de invierno

La segunda historia que se conoce de la nochebuena habla sobre el símbolo y la importancia que le daban los aztecas. Para ellos era “la nueva vida” alcanzada por los guerreros muertos en batalla.

La nochebuena era muy apreciada por Nezahualcóyotl. Sin embargo, como ésta no podía crecer en la capital por la altitud, se crearon jardines botánicos en los que se cultivaban plantas para motivo ornamental y medicinal.

Fueron los frailes misioneros quienes le otorgaron el nombre de nochebuena, debido a que la flor alcanza su máximo esplendor en invierno.

Por su belleza y color, la nochebuena es una de las flores mexicanas más conocida en el mundo. Una flor que no puede faltar en estas fechas decembrinas.

Fotos: Especial