Las fiestas por fin terminaron, muchas personas ya están empezando la dieta y quitando las luces de Navidad. Pero no sientes que tu casa sin el arbolito y el nacimiento le hace falta algo, como ¿color o vida? Bueno eso se soluciona fácil, siempre puedes ir a un puesto de flores y comprar un ramo. Con todas las opciones que hay no será difícil encontrar la flor perfecta.
La flor nacional
Tal vez unos girasoles le den color a tu casa, o ¿qué tal unos crisantemos? De repente, las ves, las dalias son perfectas. La flor nacional. Esta flor es tan importante para México que tiene su propio día, se celebra el 4 de agosto. Y en 1963 fue declarada, por decreto presidencial, como flor nacional y símbolo de la horticultura.
¿Por qué? En el mundo existen 43 especies de dalias y 35 son endémicas de nuestro país. Las dalias han conquistado a miles de personas en todo el mundo. Los aztecas la llamaban “xicamiti”, significa flor de camote. También le decían “acocoxóchitl”, quiere decir tallos huecos con agua. Los indígenas fueron los primeros en cultivarla, domesticarla, reproducirla y cruzarla. Dando como resultado múltiples variedades de dalias.
Después en 1784 Vicente Cervantes, catedrático de botánica, le envió semillas mexicanas a Antonio José Cavanilles y Palop en Madrid. Las flores conquistaron a Cavanilles y desde ese momento empezaron a viajar por Europa. Desde Inglaterra a Holanda las dalias conquistaron a todo el mundo. Fue hasta 1850 que regresaron a México las dalias modificadas.
Curativa y comestible
Además de ser la flor perfecta para adornar tu casa, también tiene propiedades curativas y es comestible. Los pétalos pueden usarse para salsas, infusiones, ensaladas, en todo lo que se te ocurra. Y así como la fruta, su sabor cambia dependiendo el color, los pétalos blancos son ácidos y los amarillos y rojos son más dulces. También pueden ser utilizados como colorante, antes los usaban para teñir telas de algodón.
La raíz se vende fresca y se puede consumir en rebanadas, son una gran fuente de fibra. El tubérculo seco puede ser utilizado para hacer té y ayuda a regular los triglicéridos. O se puede moler y con el obtener harina para hacer galletas.
La dalia es una planta perfecta y mágica, no la desperdicies la próxima vez que la compres.