Lejos de la ciudad, el tiempo corre de manera distinta, y en esta ocasión, te traemos un destino que no sólo te impactará. Sino que también, te dará la bienvenida a otra forma de sentir la vida.
Se trata de las cuevas de los cristales, también conocidas como las cuevas de Naica. Estas hermosas e imponentes estructuras naturales se encuentran en Chihuahua, y albergan los cristales más grandes del mundo.
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¿Cómo surgieron?
Su historia es insólita, pues fueron descubiertas en el año de 1794, por Alejo Hernández y Vicente Ruiz. Se cuenta que, en muchas de sus expediciones, ellos estaban empeñados en encontrar una mina de oro. Pero en su lugar, lo que encontraron fue un lugar lleno de vetas de plomo, plata y zinc.
A partir de ese día, se comenzó el estudio de los materiales que por miles de años permanecieron intactos.
Características que las vuelven únicas
Su temperatura es diversa, de acuerdo a la profundidad puede bajar y subir drásticamente hasta alcanzar los 45°C. Por otro lado, se estima que el porcentaje de humedad va de entre los 90 y 100. Por eso, si te quieres lanzar, cuenta con un guía. Ya que por todas sus características es difícil que el ser humano sobreviva más de dos horas en ella.
Eso sí, conforme vas explorando puedes observar increíbles palacios de cristal y escenarios que sólo habías visto en películas. Sus paredes y el suelo están completamente salpicados de cristales en forma de bloques colosales. Muchos de ellos, en algunas ocasiones, se agrupan para formar ángulos paralelos y cruzados.
¿Qué puedes observar?
Cueva de las Espadas
Esta sala es una cavidad que alberga cristales que alcanzan hasta los dos metros de largo. Toda la sala tiene un corredor que mide 87 metros de largo y que claro, esta tapizada por cristales. Dos de ellos, fueron extraídos y ahora, son exhibidos y conservados en los museos mineralógicos más grandes del mundo.
El ojo de la reina y La cueva de las Velas
Estas dos cavidades se descubrieron en el año 2000, y su nivel de profundidad va de los 290 a los 300 metros. Aquí, podrás ver el proceso de crecimiento no sólo de los cristales, sino de otras especies que te encantarán con su misticidad transparente.
Cueva de los Cristales
Por último, esta cueva esta constituida por una enorme geoda de paredes completamente rojas. Su centro, tiene un brillo natural gracias a las miles de selenitas o piedra de luna, que alberga en su interior.
¡Tranquila y silenciosa, este maravilloso lugar espera ser descubierto por ti!