En el estado de Quintana Roo se encuentra una de las áreas protegidas más grandes de México. Es un tramo de costa en la península de Yucatán llamado se llama Sian Ka’an. Los mayas lo nombraron así por su excepcional belleza. Su traducción del maya significa ‘origen del cielo’ o ‘el lugar donde empieza el cielo’.
La UNESCO le brindo un lugar en la lista de Patrimonios Naturales de la Humanidad en 1987. La propiedad cubre más de 400,000 hectáreas de ecosistemas terrestres, marinos y costeros.
Sian Ka’an es todo un oasis caribeño y un deleite visual. Cuenta con diversos bosques tropicales, sabanas de palmeras, humedales, lagunas, extensos manglares, playas de arena y dunas. Las áreas marinas protegen una parte valiosa de la Barrera de Coral Mesoamericana.
También encontramos cenotes, profundos sumideros naturales llenos de agua que albergan comunidades de vida especializadas, y petenes, que son árboles que emergen de los pantanos, los cuales pueden medir hasta treinta metros de altura. Éstos últimos son un tesoro inestimable porque tienen sistemas subterráneos de agua dulce y por lo mismo representan vida, porque son esenciales para la conservación de especies.
Chécate esto: ‘Conoce los 10 nuevos pueblos mágicos de México’
Belleza natural de amplias magnitudes
La reserva cuenta con una fauna excepcional. Habitan jaguares, pumas, monos, ocelotes, tapires centroamericanos, gran diversidad de aves migratorias y residentes. En cuanto a la vida marina, tiene muchas especies de peces y alberga al Manatí de las Indias Occidentales, así como a cuatro especies de tortugas marinas, que por cierto allí anidan.
La belleza de Sian Ka’an es única. Es un mosaico de elementos tan diversos que se logran conjuntar de tal manera que nos regalan a la vista todo un paraíso. Es un lugar que puedes visitar, pero debes ser muy responsable. Utiliza los senderos marcados únicamente. No provoques a la fauna con ruidos o colores muy vistosos. No tires basura ni dañes la flora y fauna.
Respeta todo espacio y forma de vida. Recuerda que es casa de miles de especies. Sigue las instrucciones de los guías especializados, entre otras reglas y recomendaciones para que tu visita sea toda una buena experiencia.