Curiosidades del Templo Mayor: centro absoluto de la vida religiosa mexica

¿De visita o de paseo por la Ciudad de México? Te recomendamos conocer el Templo Mayor. A finales de los 70, trabajadores de la compañía de luz al querer instalar cables de luz, dieron por accidente con estructuras que los arqueólogos identificaron con el buscado templo.

Una ventana al pasado

Hoy puedes visitar una gran sección de los templos dedicados a Huitzilopochtli, señor de la guerra, y Tláloc, señor de la lluvia. Entre los muros de varias secciones del templo, hay altares, serpientes talladas en piedra y un Tzompantli, que es una pared cubierta con representaciones de cráneos ya que los aztecas rendían culto a los muertos, tradición que se preserva muchos siglos después.

El origen de su fundación

El Templo Mayor fue fundado en 1325, conocido como el gran templo en la capital azteca de Tenochitlán. Fue conquistada y destruida por los españoles en 1521. El poder colonial erigió sobre sus ruinas una nueva ciudad, por lo que durante muchos siglos el santuario principal de los aztecas cayó en el olvido y quedó enterrado debajo de muchas piedras.

El objetivo del Templo Mayor

Era el edificio más alto y el de mayor volumen de todo el recinto ceremonial. Su objetivo principal era dar protección y al destinar tierras a los mexicanos, éstos tendrían que ayudar como mercenarios en las guerras de expansión de los tepanecas de Azcapotzalco, además de pagar un tributo en diversos productos. La estructura está orientada hacia el poniente, hacia donde cae el Sol. En la parte alta había dos adoratorios, uno dedicado a Huitzilopochtli, dios solar y de la guerra, y el otro a Tláloc, dios de la lluvia y de la fertilidad.

Cómo llegar

El museo permanece abierto de martes a domingo de las 9:00 a 17:00 horas. Museo del Templo Mayor ubicado en Seminario 8, Centro Histórico, Cuauhtémoc, 06060 Ciudad de México, CDMX.