Sierra del Tigre, bosque que se convierte en paraíso para sus visitantes

Por Lucía Lizárraga Castro. Corresponsal

Pinos formados en hileras inmensas, colorido de poblaciones rústicas de la época colonial enclavadas en el corazón del bosque, clima agradable y aire puro, distinguen a la Sierra del Tigre, en este municipio.

Este paraje se ha convertido en un paraíso para miles de visitantes que acuden a realizar recorridos turísticos, para quienes gustan de los deportes extremos o bien participan en campeonatos y rallys de motocross y automóviles 4×4.

Se trata de un bosque que abarca más de seis mil hectáreas comunicadas por diversas poblaciones que la conforman y su nombre se debe, según los registros municipales, al hecho de que este paraíso es tierra de gatos monteses que eran confundidos con “pequeños tigres”.

Gracias a estas bondades de la naturaleza que hacen del lugar uno de los sitios más bellos del país, los pueblos de la zona que abarca los municipios de Atoyac, Gómez Farías, Concepción de Buenos Aires, Tamazula de Gordiano, Valle de Juárez, Mazamitla, Manzanilla de la Paz, Zapoltitic y Zapotlán El Grande, aprovechan la actividad turística.

Los visitantes pueden hacer recorridos por el corazón de la Sierra del Tigre en un Safari con prestadores de servicios turísticos y una vez ubicados a dos mil 800 metros sobre el nivel del mar tienen la posibilidad de apreciar montañas cubiertas por un frondoso bosque cubierto por pinos, robles, encinos, árboles de capulín, tejocote y pera.

La Sierra del Tigre, que forma parte de la Sierra Madre Occidental, es por mucho uno de los sitios más presumibles que tiene Jalisco, ya que en la cima de casi cinco mil pies de altura se pueden disfrutar las mejores vistas de la región.

Ubicada al sureste de la capital de Jalisco, la Sierra del Tigre permite al visitante tener un perfecto y maravilloso contacto con la naturaleza, con impactantes escenarios que disfrutar y también para tomar fotografías que registren un inolvidable paseo.