¿Plagio o tributo? Casos en los que se volaron diseños mexicanos

Actualmente hemos visto cómo distintas casas de moda se han apropiado de diversos diseños y estilos mexicanos sin el consentimiento debido.

Si bien, el caso más reciente es el de la famosa marca Carolina Herrera, quien se adueñó de técnicas de bordado ancestrales, patrones y diseños identitarios de comunidades indígenas. Esto para su más reciente colección: Resort 2020.

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Muchos otros casos han salido a la luz. Esto nos hace pensar si en realidad se trata de un homenaje, o bien, es un triste plagio con una intención comercial muy marcada.

¿Qué otros casos existen?

Si bien recordarás, la prestigiosa marca Michael Kors, en algún momento pensó que sería una idea increíble sacar un suéter de jerga. Sí, como el que usan los estudiantes de la facultad de filosofía y letras cuando hace mucho frío.

De acuerdo con una famosa revista, el autor encontró en estas prendas la “inspiración” necesaria para elaborar sus diseños. Pero esto no es todo. Las prendas plagiados fueron presentados en la Semana de la Moda en Nueva York, una de las más esperadas por los seguidores de la alta moda.

Pero gracias a nuestras meticulosas investigaciones periodísticas, logramos encontrar un detalle que diferencia una prenda de la otra: el precio. Mientras que nuestro suéter típico no rebasa los 200 pesos, el diseño de Michael Kors cuesta nada más y nada menos que 20 mil pesos.

Los diseños de “San Marcos”

Hogar mexicano que se respeta tiene entre su variedad de cobijas alguna de la marca San Marcos. Ya sea con forma de tigre, leones u otros animales salvajes.

Pues resulta que este producto tan tradicional y efectivo en nuestro país fue robado. La responsable fue una diseñadora americana. Retomó los diseños de los cobertores San Marcos para “crear” su colección: New Classics. Así, convirtió los cobertores “San Marcos” en abrigos.

Y a pesar de que su intención era recuperar por medio de esta prenda los valores y símbolos mexicanos, en otros estados se venden con el mismo objetivo. Eso sí, con un valor diferente, pues cada abrigo costaba arriba de 9 mil pesos.

Los bordados de Tlahuitoltepec

Tlahuitoltepec es un pueblo ubicado en la sierra de Oaxaca. Es famoso por sus técnicas de bordados y diseños milenarios. Y como todo lo mexicano es bueno, pues una de sus blusas típicas también fue plagiada.

Sólo que, en este caso, el robo fue hecho por la diseñadora francesa Isabel Maranat. La autora presentó la prenda como propia dentro de su colección y las autoridades oaxaqueñas no tardaron en denunciar el caso.

Afortunadamente, la denuncia llegó a los tribunales correspondientes. Al final, la francesa retiró de sus tiendas la blusa que se vendía en tan sólo cuatro mil 780 pesos. Esto es diez veces más que su valor original.

Después de todo este recuento, podemos pensar que la palabra “homenaje” no en todos los casos funciona para explicar el robo de nuestros símbolos identitarios, que a lo largo del tiempo, han sido utilizados sin consentimiento alguno.