Una de las calles de Coyoacán esconde tras su nombre una historia que pocos conocen. ¿Has pasado alguna vez por Dulce Olivia?
Hay barrios de la ciudad que te hacen preguntarte cuál es la historia detrás de los nombres que lleva cada calle. Algunos son chistosos, otros en memoria de algo o alguien. Personas, fechas, acontecimientos y hasta objetos figuran el los letreros en cada esquina del país. Uno de ellos, en Coyocán, lleva el nombre de una famosa actriz. Esta es la historia de la calle Dulce Olivia.
Todo esto inició aproximadamente en la década de los 40. Pocos años antes, en 1939, Olivia de Havilland había formado parte del elenco de Lo que el viento se llevó. Esta cinta ayudó a cimentar su fama, convirtiéndola en una de las más famosas y mejor pagadas actrices de Hollywood.
Por supuesto, Olivia tenía miles de admiradores. Algunos de ellos se encontraban también en el mundo del cine de entonces, y uno en particular es el protagonista de esta historia.
Emilio el Indio Fernández era un actor, guionista y director mexicano. Sus películas forman parte de la época de oro del cine mexicano, y muchas siguen siendo populares aún hoy. Y por supuesto, no podía ignorar el talento y la belleza de Olivia de Havilland.
Pronto, las cartas comenzaron a convertirse en una rutina entre ambos. Su relación por correspondencia era mediada por un traductor: Marcus Goodrich. Y he ahí el inicio del fin de esta historia.
Olivia se enamoró, pero no de Emilio, sino de Marcus. De hecho, incluso se casaron y tuvieron al primer hijo de la actriz, Benjamin, en 1949.
Aunque la relación entre Olivia y Emilio no tuvo un final feliz, es esa la razón del nombre de esta calle. Un día, Emilio decidió cerrar una calle y adjudicarse la propiedad de la misma. El mismísimo regente del entonces Distrito Federal tuvo que insistirle varias veces para que volviera a abrirla. Sin embargo, aunque Emilio accedió, decidió que de ahora en adelante, esa calle se llamaría Dulce Olivia.
Nadie sabe con certeza si Olivia supo sobre esta calle. Sin embargo, cientos de personas aún la transitan a diario, pues se halla en una de las zonas más visitadas de la CDMX. Y tú, ¿has pasado por la calle de Dulce Olivia?