Vacuna contra COVID-19 podría ser una realidad gracias a la UNAM

Científicos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), están desarrollando una vacuna contra el SARS-CoV-2. El equipo de la investigadora en medicina molecular, Laura Palomares, está tomando como precedente el trabajo que se ha realizado contra el dengue y el zika.

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Hecha con tecnología de ADN recombinante

El proyecto que encabeza Palomares, aprovecha las plataformas y la metodología usada en los mencionados zika y dengue. El resultado ha sido una vacuna hecha con tecnología de ADN recombinante, a la que llaman “quimera”.

“Utilizamos otro virus que no es patógeno, la cápside (proteínas que recubren y protegen el genoma de los virus) de otro virus, y lo decoramos con un epítopo (o determinante antigénico), con pedacitos del virus de zika y dengue para entonces tener una partícula viral que contiene esas secuencias que inducen la protección”, explicó Palomares.

Este mismo proceso, será el que se emplee para desarrollar la vacuna contra el SARS-Cov-2. “Le quitamos (a la plataforma) lo de zika y dengue, le ponemos lo de coronavirus, y ya podemos tener una vacuna contra el SARS-Cov-2”, puntualizó la científica mexicana. Cabe mencionar que, aunque este proceso pueda parecer sencillo, tomó dos años de trabajo en ingeniería genética.

Vacuna lista en… ¿tres años?

Ésta está en fase de pruebas en modelos animales. No obstante, se prevé que las pruebas en humanos de la primera puedan realizarse en tres años. Asimismo, se espera que la empresa mexicana Liomont, apoye con la fabricación, esto permitiría que la producción de la vacuna no dependa de empresas transnacionales.

Al respecto, la también maestra en biotecnología por la UNAM expresó su confianza en las vacunas como una vía para enfrentar las pandemias.

“Estoy convencida de que la única manera en que nosotros vamos a poder responder a este tipo de pandemias de forma oportuna va a ser utilizando plataformas. Me refiero a una vacuna en donde ya tengamos todo el tren de producción, de desarrollo, de estabilidades”.

Palomares también hizo énfasis en que la sociedad debe ser consciente del tiempo que tarda desarrollar una vacuna. “Pensamos que el laboratorio va a descubrir una vacuna y ya con eso va a llegar al paciente, y no es así. El que pueda llegar al paciente requiere mucho tiempo y mucho esfuerzo en el desarrollo de los procesos para la producción y caracterización de las vacunas”.