La Sierra Madre Occidental es uno de los sistemas montañosos más importantes de México. La extensión de sus fascinantes asentamientos abarca todo el oeste mexicano y el extremo suroccidental de los Estados Unidos. En sus mil 500 km de largo recorre Arizona, parte de Sonora, Chihuahua, Sinaloa, Durango, Nayarit y Jalisco. En este último estado se une al Eje Volcánico Transversal de México.
El terreno es muy escarpado en varias regiones, lo que hace que las variaciones de temperatura sean extremas. Las montañas que integran la Sierra Madre Occidental reciben distintos nombres. Al norte de Sinaloa se encuentra parte de la gran sierra Tarahumara. Las principales ramas de la sierra, hacia el este de Sinaloa, pertenecen a la gran sierra de Tepehuanes, y aunque en Durango están los picos más elevados de ella, en Sinaloa destacan por su altitud las sierras de Badiraguato, Tamazula y los Frailes.
¿Te lo perdiste? “La Sepultura, aire puro y aventura en la selva chiapaneca”
Esplendorosa belleza
Su importancia recae en su función y esplendorosa belleza, pues es el pulmón más majestuoso de la zona norte de México. Si bien oxigena nuestro cuerpo, también es hogar de diferentes especies de animales. Entre ellas existen 290 aves, 70 mamíferos, 87 reptiles y más de 20 anfibios. Los mamíferos destacan las ardillas, los zorrillos, jaguares, jabalíes, diferentes especies de murciélago entre otros. Además, resguarda dos especies importantes en peligro de extinción; el puma y el oso negro.
La Sierra Occidental no sólo conserva distintas especies, sino que ha eclipsado hechos trágicos para nosotros. Uno de los casos que vale la pena recordar fue cuando debilito a “Patricia”, uno de los huracanes más fuertes de la historia. La sierra logró que el huracán se introdujera a la montaña. En la actualidad la cierra se ha visto perjudicada por la inmoderada tala forestal de árboles, y es que cuenta con más de 15 especies diferentes de pino.
De hecho, este número es impresionante, pues la mayoría de sitios así cuentan con menos de cuatro especies. Lo cual no sólo ha deteriorado el ecosistema, sino también a sus numerosas especies. Entre ellas flores y animales endémicas que hoy por hoy se encuentran al borde de la extinción.