Pareciera normal que cada dos años (o incluso menos) llegue el contrato de tu nuevo celular, más actual, más novedoso, más funcional y con mejores capacidades. ¿Pero has pensado en todo el daño que le causa al medio ambiente? Y lo peor, ¡muchas veces tu antiguo celular sigue funcionando!
Ahora imagínate, si cada persona tiene por lo menos un teléfono inteligente y cada dos años lo cambia. ¿Cuántos celulares suman? Hay investigaciones que estiman que una cuarta parte de la población tiene dos celulares por lo menos.
En un estudio realizado por el profesor Lofti Belkhir, asociado de la Universidad de McMaster, y el graduado de la facultad de Ingeniería, Ahmed Elmeligi, señalaron que las redes de comunicaciones y los centros de datos en los próximos años serán los que más contribuyan a la huella de carbono. Y los celulares inteligentes, ¡los más dañinos de todos los dispositivos!
Se calcula que para el 2040, serán 8.7 millones de celulares, lo que equivaldría al 95% de la población.
¿Qué causa el daño?
En sí el problema no es usar un teléfono o la energía que gasta a diario. Sino los materiales con los que se fabrican. Los cuales son escasos y de complicada extracción como el oro, coltán y tungsteno. Así como la energía que se ocupa en el procedimiento industrial.
Para las compañías de telefonía celular esto representa una ganancia, y hasta los teléfonos están hechos para que funcionen menos tiempo. Sin embargo, según los investigadores canadienses, los avances tecnológicos han permitido que aparatos, como las tabletas electrónicas, tengan una vida de aproximadamente 7 años. Así que el problema no es la tecnología, sino que los consumidores adquieren el hábito de consumo.
¿Pero qué podemos hacer?
Para combatir el crecimiento de la huella de carbono, sería necesario que aumentaran la vida de los celulares, por lo menos a 4 años. Claro que podría haber resistencia de parte de las empresas.
Pero no todo es responsabilidad de las compañías, también depende de cada uno de nosotros. Y con esto, no me refiero a dejar de usar por completo la tecnología. Pero, ¿por qué no usar más tiempo nuestro celular? No es necesario que lo cambies cuando se vuelve más lento o que la batería se agota más rápido.
Algo que también es muy importante recordar, es dar buen manejo a los residuos de estos aparatos. Colocarlos en los recipientes adecuados para no contaminar por metales preciosos que contienen, a veces incluso más que las computadoras. Reciclar estos materiales sería una gran forma de contribuir al medio ambiente, las empresas podrían recuperar y reutilizar los materiales para la fabricación de nuevos celulares. Además podrían utilizar energías renovables.
Otra solución es buscar opciones de celulares más amigables con el ambiente, o sustituir la batería.
Cuida tu celular, cárgalo hasta que la pila esté por agotarse y no lo dejes conectado por más tiempo del que necesita. Eso alargará la vida de tu teléfono y no tendrás que cambiarlo. Además, gastas menos energía eléctrica.
La tecnología y los celulares no son imprescindibles, podemos dejarlo de lado un momento y disfrutar de los hermosos paisajes de la naturaleza. Platicar con la familia, amigos, descansar un rato, hacer ejercicio al aire libre. Busquemos minimizar el impacto. No tires a la basura muchas de los logros ecológicos y usa por más tiempo tu celular… La naturaleza te lo agradecerá.