El Departamento de Protección a la Tortuga Marina de la Comisión de Parques y Biodiversidad de Tamaulipas, rescató más de 200 tortugas Caguama (Caretta caretta) y Verde (Chelonia mydas), que se encontraban varadas en la playa La Pesca, para luego reintegrarlas a su hábitat.
Abelardo Gámez Morales, responsable de Protección a la Tortuga Marina detalló que las tortugas se encontraban varadas en estas playas por el letargo que las bajas temperaturas provocan a estos reptiles endémicos de las costas del pacífico y atlántico mexicano.
Señaló que desde el descenso de las temperaturas, provocado por el frente frío número 20, personal del Campo Tortuguero La Pesca realiza diariamente un recorrido de más de 60 kilómetros por el litoral en busca de tortugas encalladas a merced de las heladas y depredadores como las gaviotas.
Apuntó que “nosotros las traemos al campamento tortuguero, las ponemos en un cuarto especial con calor a esperar que el letargo pase, y una vez activas, vamos y las liberamos a la zona de alimentación de ellas”.
Indicó que la colaboración con los lugareños ha sido vital para ubicar a los quelonios varados en playas de Soto La Marina y Aldama, a quienes se les recomendó dar aviso a la autoridad al avistar tortugas en esta condición y evitar regresarlas al agua.
El especialista refirió que las tortugas rescatadas en esta condición requieren de una recuperación especial antes de ser devueltas a su entorno, en este caso en las inmediaciones de la desembocadura del río Soto La Marina.
“Hemos triplicado nuestros esfuerzos para que no se quedara ninguna tortuga en la orilla y muriera. Estamos haciendo un trabajo inédito, que casi nunca se había hecho, y todo es a favor de la tortuga, para que logre subsistir, sobrevivir y ser liberada en su medio natural”, subrayó Gámez Morales.
Agregó que los esfuerzos de conservación de la fauna marina que realiza el Gobierno de Tamaulipas, particularmente con las tortugas que encuentran en las costas del estado sus zonas de alimentación o desove como la Tortuga Lora (Lepidochelys kempii), que han permitido triplicar los sitios de nidación de esta especie en peligro de extinción, endémica del litoral tamaulipeco.