A raíz de la pandemia, empresas y trabajadores se enfrentan al teletrabajo, también conocido como Home office. Para algunos esto fue de gran ayuda, para otros todo lo contrario. Lo cierto es que, a diferencia de otros países, México todavía está rezagado en cuanto a cuestiones legales.
Esta modalidad de trabajo está en las leyes mexicanas desde hace varios años. Sin embargo, no cuenta con suficientes elementos para garantizar protección legal a trabajadores.
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Trabajo en casa, lo bueno y lo malo
A partir del confinamiento, muchas personas comenzaron a trabajar en casa y esto trajo algunos beneficios.
Uno de ellos es que se reduce el tiempo de traslado para los trabajadores de su domicilio a la oficina. También hay quienes pueden ajustar sus horarios en la medida que mejor les quede para cumplir con sus responsabilidades. Por lo tanto, les resulta más cómodo y hasta cierto punto para unos es más productivo.
Mientras que las empresas se ahorran rentas de espacios de oficina y perciben más productividad.
Claro que hay desventajas para ambas partes, pues hay otros trabajadores a los que se les hace más pesado. Además, muchos extrañan el ambiente laboral o no cuentan con los recursos suficientes para trabajar desde casa. Para muchos patrones y empresas también es un reto al no poder tener “el control” sobre las actividades de sus empleados.
Home office en México, un reto legal
Sin embargo, en tema de leyes hay un rezago en nuestro país respecto al home office.
Desde 1988 la Ley Federal del Trabajo regula el trabajo en casa. Hasta el 2012 se agregó un párrafo que incluye a las actividades que ocupan las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC). Así lo menciona el estudio “El teletrabajo, un estudio comparado” que elaboró el Instituto Belisario Domínguez (IBD) del Senado.
Pero esta ley no contiene elementos fundamentales que brinden seguridad legal a los trabajadores y a los patrones.
Según el estudio, México es de los países que menos balance tiene entre la vida laboral y personal. Donde mejor existe es en: Países Bajos, Italia y Dinamarca. Por otro lado, Islandia y Noruega tienen importantes logros en esta modalidad de trabajo. Si bien no cuentan con una legislación propia, ocupan lo que señalan los Acuerdos de la Unión Europea.
Un país que sí cuenta con su propia legislación es Finlandia. Ahí actuaron e implementaron rápidamente el trabajo en casa para evitar contagios. Mientras que, en América, el estudio indica que Estados Unidos, Argentina, Chile, Ecuador y Colombia tienen más avances al respecto.
Dentro de su legislación hay artículos y apartados específicos relacionados con el teletrabajo. Por ejemplo, incluyen los derechos y obligaciones tanto de los trabajadores a distancia como de sus patrones. También dan detalles sobre el registro de los trabajadores, sus equipos o herramientas, así como de políticas de seguridad social.
Nueva realidad laboral
Ante la situación actual, el home office fue una gran solución para muchos, pero también es todo un reto.
Independientemente de cuánto dure la pandemia, un gran porcentaje de empresas podría continuar con el ritmo de esta modalidad de trabajo. Por lo que es importante trabajar en materia de legislación laboral para garantizar este derecho a empresarios, patrones y empleados.
FOTO PRINCIPAL: EXPANSIÓN