¿Escuchas la palabra Campeche y qué es lo primero que se te viene a la mente? Cuando hice este ejercicio, supe que mi conocimiento sobre este bello estado de mi México, era muy pobre. Después de pensarlo un poco, creo que es eclipsado, por los estados vecinos que tienen más notoriedad turística… ¡Y qué gran error!
Aunque en Campeche conviven; la grandeza de la época prehispánica, la arquitectura y tradiciones de la Colonia y la modernidad de nuestro tiempo, guarda un misterio tan enigmático como imponente. Su nombre es Calakmul.
Lo primero que debes saber es que si logras subir a la pirámide más alta te encontrarás con una de las vistas más impactantes, hechizará todos tus sentidos… Tus manos sentirán que pueden tocar el cielo, tus pies sentirán como echan raíz en una construcción que permanece en pie desde hace siglos, tus oídos escucharán solo el ruido de los animales de la selva y el sonido del viento cuando entra en contacto con los árboles, y lo único que alcanzarán a ver tus ojos son la punta de otras dos pirámides rodeadas de selva y nubes.
Calakmul significa en maya “Dos Montículos Adyacentes” (Ca dos, Lak adyacentes, Mul montículo artificial o pirámide), nombre que hace referencia a las dos grandes estructuras que dominan la selva. Investigaciones recientes concluyen que fue la ciudad más importante del Clásico Maya junto con Tikal y Palenque.
Llegar a este recinto prehispánico no es sencillo. Mi ruta incluyó 5 ciudades (de las que les platicaré en otra nota), y aunque sé que no todos pueden hacer un recorrido similar, les recomiendo hacer una parada en la ciudad de Escárcega. Esta pequeña ciudad campechana les proporcionará el descanso que necesitarán, creanme. De Escárcega a Calakmul son 152.7 km, pero el viaje no termina ahí.
Luego de pasar una pequeña caseta de información (donde les pedirán el pago de 64 pesos por persona) continuarán su trayecto por una pequeña carretera que atraviesa la selva, conduzcan con cuidado porque la fauna vive en total libertad y habrá uno que otro pavo real queriendo cruzar la calle. Pongan atención porque si tienen suerte podrían ver a alguna de las 86 especies que ahí viven, entre las que destacan: jaguares, ocelotes, tigrillos, monos araña, osos hormigueros, águilas, monos aulladores, boas constrictor, pavo reales y tapires. (Tranquilos, la mayoría solo salen por las noches)
Una vez ahí, sabrás que todoooo valió la pena, ¡eres de las pocas personas que se han atrevido a llegar y que pueden presumir de estar en una de las ciudades mayas más impotentes. Sube las pirámides, ¡no te limites!, pero sobretodo aprovecha todo lo que puedas, recuerda que lo que estás regresando en el tiempo, estás viendo y disfrutando la misma vista que tus antepasados mayas tuvieron ante sus ojos.
Recomendaciones básicas:
- Ropa cómoda y fresca. Hace mucho calor y hay humedad.
- Llevar gorra, protector solar y repelente de mosquitos (si visitas la zona en los meses de verano, éste será tu mejor aliado)
- Lleva una mochila donde puedas guardar los básicos; botella de agua, papel de baño, protector, repelente, y sobretodo la basura que puedas generar.
- IMPORTANTE: Es una reserva ecológica por lo que no encontrarás muchos botes de basura y tampoco puestos de comida ni lugares donde vendan agua o comida. ¡Este es un lugar para lanzarte a la aventura al natural!
- Recomiendan visitar la zona en los meses de invierno, pero si quieres aprovechar las vacaciones de verano, solo debes llevar más líquido y prepararte para el calor y la humedad.
Después de haber concluido tu travesía puedes hacer lo que yo y volver a Escárcega a descansar. Hay hoteles pequeños pero muy confortables, yo me hospedé en el Hotel Yaakunah. Un lugar en el que me sentí en familia y donde conocí personas amables y dispuestas a ayudarte en todo lo que pueden.
Si prefieren hacer el viaje en un solo día, deben saber que de la ciudad de Campeche al municipio de Calakmul son 302.4 km. De ustedes dependerá cómo realizar el viaje…
Lo único que me resta decir es que la magia de este lugar es tal, que regresas con una nueva energía y disfrutando de una manera distinta lo que nos regaló la naturaleza y la herencia de nuestros antepasados. Atrévete a conocer uno de los estados más encantadores de la República Mexicana, descubrirás que tiene un encanto especial que ofrecer lleno de tradición, cultura y belleza.