“Como el cine mexicano, yo también tuve mi época de oro…”
La “Vitola”, cantante prolífica, comediante de talento natural e inmensamente querida en su momento, es una de las figuras del cine de oro mexicano que en la actualidad muy pocas personas reconocen cuando la ven, pero que sin duda vale muchísimo la pena recordar. Es por eso que hoy te compartimos estos datos sobre una de las mejores artistas que ha dado nuestro país… y eso que no nació aquí (¿Y qué mas da? si, como dijera Chabela Vargas, “los mexicanos nacemos donde se nos da la… gana“) ¿Y tú, qué tanto la conoces?
1. ¿Sabías que su apodo proviene de los puros cubanos? Su verdadero nombre era Fanny Kauffman y fue una artista de formación pluricultural nacida “por accidente” (dirían por ahí) en Toronto, Canadá, el 11 de abril de 1924. A muy temprana edad, su familia emigró a Cuba, de donde tomó el curioso apodo de “Vitola”, que en esta isla del Caribe se utiliza para clasificar los distintos tamaños de los puros (aunque la ‘vitola’ también puede ser el anillo o etiqueta con la marca del puro).
2. ¿Sabías que el sueño de la “Vitola” era ser cantante de ópera? No había cumplido el año cuando se mudó a La Habana, donde derechito le entró a la “artisteada” tomando clases de canto para ópera. Desafortunadamente, para ello requería cierto nivel de seriedad… ¡Y no es que no supiera cantar! De hecho, lo hacía muy bien, pero su extrema delgadez y los gestos que hacía al cantar provocaban esa extraña combinación de risas y admiración que sólo ella podía generar en el público.
3. A sus 22 años abandonó la isla y se trasladó a la Ciudad de México, donde fue contratada para cantar en el Teatro Arbéu, hoy Biblioteca Miguel Lerdo de Tejada en el centro histórico, logrando un éxito relativo tras su debut en 1943. Pero fue luego de tres años cuando descubrió que quizá en el cine encontraría su lugar, ya que en ese año apareció por primera vez en una película: “Se acabaron las mujeres”, dirigida por Ramón Peón.
4. Un día, al terminar una de sus funciones, cierto comediante famosón que había asistido a verla se aproximó hacia ella y le propuso participar en una película junto a él… ¡Era nada más y nada menos que Tin-Tan! Junto al “Pachuco de Oro”, la “Vitola” filmó varias películas, siendo la primera de ellas una de las que más tarde se convertirían en clásicos del cine mexicano: “El rey del barrio”, dirigida por Gilberto Martínez Solares.
5. Tuvo dos matrimonios y cuatro hijos… dos de ellos fallecieron antes que ella. Se casó con el diplomático Humberto Elizondo, con quien tuvo un único hijo de nombre idéntico y que, con el tiempo, alcanzaría cierta fama actuando en diversas series y telenovelas. No existen datos concretos de cuándo falleció el primer marido de la “Vitola” ni de cuándo se volvió a casar, pero sí se sabe que su segundo esposo fue Alex King, que además de ser parte del público que asistía gustoso a verla al Teatro Arbéu, se dedicaba a la ventriloquia. Con él tuvo tres hijos: David, Moisés y Abraham (nada fanático de la Biblia ¿no?). Moisés y Abraham fallecieron, según diversas fuentes, en distintos accidentes, hecho del que la “Vitola” nunca se pudo recuperar.
6. Participó con otros grandes cómicos y figuras de la escena nacional como “Chabelo”, “Resortes” y hasta el mismísimo “Santo” en el espectáculo “Béisbol cómico”, que integraba a un equipo de beisbolistas, entrenados por la “Vitola”, que resolvían situaciones chuscas y que hacían reír tanto a los aficionados de este deporte como al público en general.
7. ¿Sabías que era una gran apostadora? La “Vitola” era gran aficionada al póker, pero con lo de “gran” nos referimos no precisamente a su talento con las cartas, sino al vicio que le generaba el juego con el que perdió, dicen, buena parte de la fortuna que había hecho con su carrera artística.
8. Un día se percató de que ya no causaba tanta gracia… y se retiró. Duro pero cierto, la “Vitola” decidió jubilarse de los escenarios al darse cuenta de que su público no se reía como en otros tiempos. De ésta forma, sumado al cansancio físico que decía sentir, la “Vitola” dijo ‘adiós’ a la farándula cuando ya rayaba los 72 años de edad (nada mal, de hecho, considerando que nunca alcanzó un ‘estrellato’ como tal).
9. El último consejo que dio fue para su hijo Humberto: “el día en que te des cuenta de que la gente ya no pague por verte y te cueste trabajo entrar en acción, retírate, sin escándalo ni alharaca”, reconociendo que todo tiene su tiempo. La misma “Vitola” decía que al igual que el cine mexicano, ella también tuvo su ‘época de oro’.
10. Fanny Kauffman, la “Vitola”, falleció tranquilamente el 21 de febrero de 2009, a los 84 años de edad en su cama del Hospital Santelena de la Ciudad de México, de causas naturales. Fue precisamente su hijo Humberto Elizondo quien comunicó al pueblo mexicano que su “Vitola” ya estaba junto a su Pachuco.