La festividad del Día de la madre se originó en México en el año de 1922. El 10 de mayo de cada año es una fecha especial para festejar al pilar de las familias mexicanas, las mamás. Nuestra gratitud y cariño por todas las labores que realizan en los hogares debía ser homenajeado.
El Monumento a la Madre
Fue una idea de José Vasconcelos, mientras tenía la función de Secretario de Educación Pública, y Rafael Alducin (periodista fundador de El Excélsior). La construcción inició un 10 de mayo de 1944 y la primera piedra fue colocada por el entonces Presidente Manuel Ávila Camacho. La obra finalizo cinco años después.
Esta obra arquitectónica fue un trabajo en conjunto de José Villagrán y el conjunto escultórico a cargo de Luis Ortiz Monasterio. Todas las esculturas que conforman el monumento, el muro y la torre fueron hechos con cantera. La obra que enaltecía la figura materna se situaba en la avenida Insurgentes, en la plazuela del jardín de arte en la CDMX.
Tras el terremoto del 19 de septiembre del 2017 en la Ciudad de México, el monumento se derrumbó. Las autoridades aún no han emitido información sobre su posible reconstrucción.
La escultura representaba a una mujer con una mazorca de maíz, símbolo de la fertilidad. En el centro, se podía ver a una madre con vestido largo y rebozo, la cual llevaba en sus brazos a un pequeño, En la parte baja tenía el lema “A la que nos amó antes de conocernos” y en 1991 se le agregó una segunda placa que decía: “porque su maternidad fue voluntaria”.