La comunidad de Ocotepec, al norte de Cuernavaca, en Morelos, decidió aplicar una iniciativa muy ecológica para su festejo de día de muertos. ¡Sustituyó los desechables de unicel por jarritos y trastes de barro!
En este poblado, la costumbre del Día de Muertos es muy importante. Incluso es reconocida por la UNESCO como Patrimonio Cultural e Inmaterial de la humanidad y atrae cada vez a más turistas. Consiste en visitar las ‘ofrendas nuevas’, es decir, las que están dedicadas a un difunto reciente. Los visitantes llevan cera a los familiares del fallecido y ellos, en muestra de agradecimiento, les regalan pan, mole, tamales, café o atole, dependiendo sus posibilidades.
El problema es que cerca de 5 mil y 7 mil personas llegan a las ofrendas anualmente. Esto representa una cantidad enorme de residuos desechables. Por esta razón, entre los integrantes de la comunidad indígena de la Junta de Mejoramiento Ocotepec, surgió la gran idea de sustituir el unicel.
Se invitó a la gente a llevar sus jarritos, tazas, recipientes y platos de barro con el fin de no generar tanta basura y evitar problemas de limpieza en la comunidad, ya que las calles terminan muy sucias después de la celebración.
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Se debe hacer costumbre
La Coordinadora de Cultura en Morelos, Karla Jaramillo Sánchez, comentó que es necesario difundir la idea y reforzarla año con año, para que, poco a poco se reduzca el uso de unicel.
Esta medida trae más beneficios además de cuidar el medio ambiente. Uno de ellos es el económico, porque la gente ahorra en vez de gastar al comprar desechables. Además de que, en caso de que los visitantes no lleven sus jarritos o trastes de barro, pueden comprarles a los artesanos de la zona y apoyarlos. Por otro lado, fomenta el respeto a esta tradición tan especial para Ocotepec, porque promueve el cuidado a la infraestructura del poblado, y porque antes se celebraba así, sin unicel.
Esta campaña de concientización es muy buena, ¿no crees? Podría aplicarse en otras festividades y en más estados del país. Eso generaría un verdadero cambio de hábitos en la población en beneficio del medio ambiente, de las tradiciones mexicanas… y del bolsillo.