Todos los misterios que guarda el Volcán Popocatépetl

En la parte centro de nuestro país, se encuentran dos majestuosas montañas que embellecen el paisaje de los límites del Estado de México, Morelos y Puebla. Al igual, si gozamos de un cielo despejado podemos observar su esplendor en la capital.
¿Ya sabes de quiénes hablamos? Si, del Popocatépetl e Iztaccíhuatl, que juntos guardan historias y leyendas que los unieron para la eternidad.

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La leyenda dice que…

Hace miles de años, el Imperio Azteca dominaba y obligaba a los pueblos vecinos a rendir un tributo obligatorio. Un día, el cacique tlaxcalteca, cansado de esto, decidió no otorgar más tributos, lo que provocó una guerra.

El cacique tenia una bella hija llamada Iztaccíhuatl, quién estaba enamorada del guerrero Popocatépetl. Su amor era tan grande que cuando comenzó la guerra, él pidió la mano de su amada a su padre, éste acepto y prometió recibirlo con una gran celebración si regresaba victorioso de la batalla.

Popocatépetl se preparó para partir y guardó en su corazón la promesa de que Iztaccíhuatl lo esperaría. Pero, un rival de amores, celoso y lleno de envidia, le dijo a la princesa, que su prometido había muerto durante el combate.

Ella no soportó la noticia y sin saber que era una mentira, murió de tristeza. Tiempo después, Popocatépetl regreso victorioso, con la esperanza de estar junto con la princesa, pero se encontró con el fatídico hecho de que ya había muerto.

Desolado, vagó por el pueblo varios días y noches sin rumbo. Hasta que tomó la decisión de asegurarse que la memoria de su princesa sobreviviera por siempre. Así que, mandó construir una gran tumba ante el Sol, amontonando 10 cerros para formar una enorme montaña. Subió con ella en sus brazos hasta la cima y la recostó. Le dio un último beso, tomó una antorcha humeante y se arrodilló frente a ella, para velar su sueño eterno. La nieve los cubrió y los dioses les entregaron la eternidad convirtiéndolos en volcanes, desde entonces permanecen juntos.

Origen del coloso

Su nombre proviene del náhuatl, Popōca (humear) y tepētl (montaña), que significa ‘Monte que humea’.

Por otro lado, el Popocatépetl, ‘popo’ de cariño, también se le conoce como Don Goyo, en honor a San Gregorio Magno, que significa guardián. En la población más cercana, Santiago Xalitzintla, lo celebran cada 12 de marzo.

Todo surgió de la historia de los lugareños, pues se dice que un día un señor llamado Antonio, mientras caminaba por las faldas del volcán, se le apareció un hombre mayor, quién le dijo que su nombre era Gregorio Chino Popocatépetl.

La gente asegura que este anciano es la personificación del volcán, que viene a asegurarse de que las personas que habitan la zona obren de buena fe y muestren respeto.

El imponente volcán

Este coloso tiene una altura de cinco mil 452 metros sobre el nivel del mar. Es el segundo más alto del país, después del Citlatépetl. Está catalogado entre los más peligrosos del mundo, debido a que cerca de 26 millones de personas habitan a menos de 100 kilómetros de él.

Su edad aproximada es de 730 mil años, y es un estratovolcán, que de acuerdo con el documento titulado Historia de la actividad volcánica del Popocatépetl del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), ha presentado varias etapas de crecimiento, que formaron al menos tres volcanes previos.

Recientemente, se halló otro cráter al interior del Popocatépetl que tiene un diámetro de 370 metros y 110 de profundidad.

Ha estado activo por más de medio millón de años. Sin embargo, en 1938, fue su última actividad eruptiva. En 1994, reinició su actividad, expulsando cenizas y gases que llegaron hasta 25 kilómetros de distancia.

Ante este hecho, el Cenapred, con el apoyo del Servicio Geológico de Estados Unidos instaló las primeras estaciones de monitoreo del volcán. Desde entonces, se mantiene en monitoreo para poder alertar y dar protección a los habitantes de los poblados vecinos.

Su última erupción fue en diciembre de 2000, que provocó la evacuación de miles de personas. Actualmente su actividad es moderada, pero hace pocos días volvió a mostrar su poder con la expulsión de una columna eruptiva de 3 kilómetros, en las que se observaron fragmentos incandescentes a una distancia de 2 kilómetros sobre las laderas del volcán.

Lugar de actividades importantes

¡Visítalo! Puedes observar toda su majestuosidad en el Parque Nacional Iztaccíhuatl-Popocatépetl, que se encuentra en el paso montañoso por la parte norte con el Iztaccíhuatl, conocido como Paso de Cortés.

Puedes realizar diversas actividades como ciclismo de montaña, practicar alpinismo en el Iztaccíhuatl, recorrer el bosque donde habitan venados de cola blanca, conejos, zorrillos y ardillas. Los meses ideales para ir son de noviembre a marzo.

O date una escapada a alguno de los pueblos cercanos, como Amecameca, Cholula, Huejotzingo que tienen de testigo a estos dos grandes amantes.