Parras de la Fuente, diversión, entretenimiento y gastronomía

Encantadoras construcciones antiguas, tierra fértil, vinos, el hogar de Francisco I. Madero, estos son los atractivos principales del pueblo mágico Parras de la Fuente, ubicado en la zona centro, del sur de Coahuila.

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Paseo en tranvía o a pie

Al llegar al pueblo, te darás cuenta de las hermosas edificaciones de la época de la conquista. Si tomas una visita guiada, te contarán historias de las haciendas, de los estanques, las huertas ¡y de muchos lugares más!

En tu ruta incluye la Iglesia de San Ignacio de Loyola, una de las más antiguas del país. Lo impresionante de aquí son los maravillosos murales y el arte sacro del siglo XVII. Otro de los edificios más bonitos y elegantes es el Palacio Municipal.

Muy cerca de ahí, y para la hora de comer, te invito a que pruebes los asados, el mole y la deliciosa barbacoa. Para la digestión, puedes dar una caminata por la Plaza del Reloj. Ahí hay una torre construida en honor a los héroes de la Revolución que posee un reloj en sus cuatro lados. O bien, toma de la mano a tu pareja y vayan a la Plaza del Beso para mostrar que su amor es verdadero, ¡será un momento tan romántico!

Disfruta de estas plazas y de sus bellos jardines mientras te comes unos ricos dulces de nuez y leche como las glorias. O bolitas, pan hojaldrado, dulces y postres típicos del lugar.

En la Casa de Cultura hay presentaciones de danza, exposiciones, obras de teatro y talleres de todo. También se exhiben pertenencias de Francisco I. Madero, quien como había mencionado, fue originario de este pueblo.

Definitivamente no te puedes ir de aquí sin ir a la cima rocosa del Cerro del Sombreretillo. Se ubica una iglesia muy bonita llamada Santo Madero, desde donde se ve todo el pueblo ¡la vista es extraordinaria!

Parras de la Fuente, el pueblito muy productor

Este bello lugar también es reconocido por ser productor de textiles, especialmente por su mezclilla de alta calidad.

Parras de la Fuente es una fuerte región productora de vinos. Y es que su clima desértico favorece el crecimiento y maduración de la vid para la elaboración de vinos deliciosos que son reconocidos internacionalmente.

Dentro de los viñedos, Casa Madero es uno de los más importantes. Su historia se remonta a 1568 cuando unos frailes encontraron un extenso y fértil campo de vid. Dentro de la Casa de Madero está la Hacienda San Lorenzo. En donde te pueden dar un recorrido por las bodegas y te invitan a probar los distintos vinos blancos, tintos y brandys.

La tradición vitivinícola de este lugar es tan grande que hasta tienen una fiesta en agosto. En la que agradecen las cosechas y ofrecen muchos eventos culturales, ricos antojitos. Y, por supuesto, degustaciones de vinos jóvenes o reposados.

Para los aventureros

También se pueden realizar otras actividades como el senderismo, bicicleta de montaña o escalar en el Cañón de Lima o en otros impresionantes cañones. En estos lugares, puedes sorprenderte con las pinturas rupestres en las rocas, conocidos como petroglifos.

También hay valles, cascadas, arroyos. Y si te gusta nadar, ve a los Estanques de Luz y demás balnearios naturales de gran belleza. Con aguas templadas y cristalinas de manantial para que tengas un descanso pleno y recargues energía.

Disfruta de la serenidad, frescura y tradición del pueblo mágico Parras de la Fuente, ¡no te querrás salir!