5 Pueblos Mágicos que encierran una misteriosa historia en México

¿Amante de lo desconocido, de las leyendas, de los mitos, y de todo lo que tenga que ver con una experiencia nueva? Estos Pueblos Mágicos sin duda deberán estar en tu lista de próximos destinos a visitar. Adéntrate, platica con la gente nativa del lugar, ellos tendrán mucho más para contarte.

Mineral de Pozos, Guanajuato

Pocos lugares resurgen de las cenizas como lo hizo Mineral de Pozos. De tener una población de más de 70,000, perdió su riqueza y se convirtió en pueblo fantasma con tan sólo 200 personas. En 1982 fue nombrado Tesoro Histórico Nacional y hoy, con más de 4,000 habitantes de varias nacionalidades, crece y se perfila para ser uno de los destinos con más personalidad del Bajío.

Fundado en 1576, después del descubrimiento de plata en Zacatecas, se convirtió en una de las más ricas colonias mineras, debido a sus vetas de oro y plata, aunque también fue importante la extracción de mercurio. La vida de los mineros en esos tiempos era muy difícil, la paga era poca y los gases que emanaban de los hornos hicieron que muchos perdieran la dentadura y afectaron su vista de por vida. 

Hoy hay 20 minas en el área y en algunos casos es posible descender para conocer sus entrañas con la ayuda de un guía. Las ruinas de Los Cinco Señores, tienen acceso al interior de sus patios, en los que resaltan varios arcos de ruinas, perfectos para ser fotografiados durante la tarde, cuando la luz aún está presente… Pero no se te ocurra entrar de noche, porque podrás escuchar, según las leyendas, los quejidos de algunos mineros que ahí perdieron la vida.

Cómo llegar:

Desde San Miguel de Allende, lo ideal es llegar a Mineral de Pozos en auto (45 minutos). No se recomienda tomar autobús, ya que no hay línea con una ruta directa, y el recorrido se podría extender hasta por 3 horas.

Real de Catorce, San Luis Potosí

Real de Catorce fue forjado a partir de la cultura minera y también de la cultura de los huicholes. El misticismo se respira en el andar fantasmal de sus visitantes y en la cercanía con Wirikuta, zona sagrada a la que cada año peregrinan cientos de personas.

La magia comienza al entrar al Túnel de Ogarrio, único acceso a este Pueblo Mágico, y sus antiguas edificaciones y enigmáticos paisajes hechizan las miradas de los viajeros.

Una de las leyendas más escalofriantes que cuentan sus habitantes es la de “El Jergas”, un ente que vive en las minas. Se dice que es el diablo, y en épocas pasadas secuestraba a los mineros, los mataba, para luego dejarlos en sitios poco concurridos. Sus familiares no sabían de su paradero hasta que eran encontrados muertos.

Cómo llegar:

Partiendo desde la Ciudad de México, hay que llegar a la ciudad de San Luis Potosí. Luego, desde este punto, se tiene que seguir la carretera 57 que lleva a Saltillo y Monterrey. En Matehuala hay que tomar la desviación con destino a Cedral, Tiburcio y Real de Catorce. Al final, se cruza el Tunel de Ogarro y finalmente se llega al pueblo.

Tlalpujahua, Michoacán

Techos rojos, paredes blancas y callejones que suben hacia una hermosa iglesia es lo que espera a quien visita este típico escenario mexicano.

Se sabe que una tarde de 1937 comenzó a llover en Tlalpujahua; la lluvia duró más de doce horas, acompañada de terribles vientos. En poco tiempo, el pueblo se inundó de agua y lodo, incluyendo la mina y el templo del Carmen del cual sobrevivió el altar y la pintura de Nuestra Señora del Carmen. En esta catástrofe murieron muchas personas y se destruyeron múltiples casas.

Hoy cuenta la leyenda que durante las noches lluviosas las empedradas calles de Tlalpujahua, son recorridas por una mujer vestida totalmente de blanco, buscando a su marido que perdió la vida en la catástrofe de 1937, y que bajo la luz de la luna se aparece un perro que camina amenazante junto a ella.

Cómo llegar:

Toma la autopista número 15 a Toluca, y posteriormente la autopista a Atlacomulco. Una vez en Atlacomulco, toma la carretera estatal número 5 hacia el oro y Tlapujahua. 

Real del Monte, Hidalgo

Real del Monte es un Pueblo Mágico con legado minero, las casonas y construcciones de aire inglés se combinan con el olor a pastes y al pan de pulque que se cocina en sus hornos.

Aquí yace una mujer que murió por amor a los 21 años. Helen May Jory se enamoró de un mexicano, pero su padre se opuso rotundamente a ese romance. Así, al más puro estilo de Romeo y Julieta, la inglesa mata al joven de un balazo para luego colocar la pistola en su sien completando la tragedia. Su tumba destaca por la belleza esculpida en mármol italiano.

Las historias de Real del Monte, como se denomina desde 1824, giran alrededor de la minería. Aún se extrae plata y oro, entre otros minerales como plomo, cobre y zinc, de la mina La Rica, donde además los visitantes pueden descender hasta 410 metros en la tierra en dos minutos. Antes de abordar el elevador, hay que portar el equipo básico de seguridad: overol o camisola, casco, cinturón, lámpara y una pila de dos kilos. Cuenta la leyenda que hay un minero fantasma que gusta de charlar con sus colegas vivos y acostumbra despedirse con la frase “Dios te bendiga”, pero si se va sin decirla, la persona está expuesta a un accidente dentro de la mina. 

Cómo llegar:

Desde Ciudad de México, toma la autopista México-Pachuca. Al llegar a Pachuca de Soto, sigue por el Boulevard Luis Donaldo Colosio y continúa hasta entroncar con el Libramiento Federal a Tampico. Pasa el crucero del Centro de Extensión Universitario (CEUNI) y busca la salida a la carretera Corredor de la Montaña. Tu destino estará a 15 minutos.

Huasca de Ocampo, Hidalgo

En lengua Nahoa, significa “Lugar de regocijo o alegría” y ‘Ocampo’ se añadió en honor a Melchor Ocampo, un científico y político liberal mexicano.

Se cree que en Huasca rondan duendes, pequeños seres míticos y en una peculiar casa de madera en medio del campo se puede conocer más sobre ellos; se trata del Museo de los Duendes. También se puede realizar un recorrido nocturno en el Bosque de los Duendes en el Centro Vacacional Sierra Verde.

Cómo llegar:

Desde la Ciudad de México debes tomar la carretera México-Pachuca por la salida a Indios Verdes. Antes de llegar a Pachuca sigues por la desviación hacia Tulancingo de Bravo y luego por la carretera del Corredor Turístico de la Montaña.