Entre Colima y Jalisco hay una bebida muy representativa que no falta durante ferias y novenarios. Se trata de la Tuxca, un destilado artesanal como el mezcal o el aguardiente.
Tuxca, bebida que nace entre Colima y Jalisco
Desde hace cientos de años y hasta el día de hoy es una bebida con mucho valor para ambos estados, sobre todo para Colima.
De hecho, Tuxca proviene del náhuatl Tascahuescomatl, que quiere decir “granero empozado”, de donde viene el nombre de Tuxcacuesco. Este municipio, cuna de la bebida, se ubica en la Sierra de Amula, justo entre Jalisco y Colima. Otros pueblos productores del destilado son Zapotitlán de Vadillo y Tolimán.
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Gracias a su método de destilación e historia, forma parte de la identidad de la región. Y es que el clima cálido y seco es propicio para la producción de agave.
Inclusive, algunas teorías proponen que la forma de hacer mezcal nació en esta zona. Poco a poco se extendió al resto del país.
Potente sabor destilado del agave
Toda la producción de Tuxca es completamente artesanal. Primero se corta y muele a mano. Luego, se hornea en pozos en forma de cono de peña volcánica. Una vez que se extrae la melaza se fermenta a baja temperatura. Al final, el destilado cae en una superficie de madera y una canaleta lo expulsa a una olla de barro.
Prácticamente se destila de la misma forma que el mezcal y se obtiene del maguey. Sin embargo, el mezcal sólo se puede producir en ciertos estados, pues tiene Denominación de Origen.
Además, el sabor de la tuxca es distinto y original y tiene un suave aroma a leña.
Otra característica de esta bebida es que se puede elaborar a partir de diversas especies de agave. Algunos ejemplos son: el cimarrón, Ixtero, Amarillo, entre otros.
Si bien no cuenta con Denominación de Origen, la tuxca es una bebida muy especial y emblemática de Colima.