Los bosques abastecen de agua limpia, aire puro, alimentos y capturan dióxido de carbono, además de que son el hogar de más de la mitad de las especies terrestres del mundo, de ahí la importancia de su conservación, para lo cual México estableció a julio como el Mes del Bosque.
De acuerdo con la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) el objeto de la celebración de la Fiesta del Bosque es enaltecer las funciones de estos ecosistemas; divulgar y realizar métodos de protección y aprovechamiento forestal.
Además establecer, restaurar y ampliar zonas boscosas y concientizar a la sociedad en general sobre cómo los árboles intervienen en la vida de los seres humanos desde el ámbito ecológico, social y económico.
Los sitios poblados de árboles y matas representan ecosistemas indispensables para la conservación de la vida en la Tierra, y una de sus principales funciones es constituir una maquinaria natural para la captura y almacenamiento de carbono, lo que contribuye a la mitigación del cambio climático.
Se instaura el Mes del Bosque en México
Por ello, desde 1959, por decreto presidencial, durante el mes de julio, en México se conmemora el Mes del Bosque con diversas actividades en las que participan autoridades federales, locales, así como organizaciones.
La Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad refirió que existen varios tipos de ecosistemas como los templados, tropicales, subterráneos, terrestres, dulceacuícolas y costeros, entre otros, en tanto que la Conanp conserva al menos 131 Áreas Naturales Protegidas con presencia de estos ecosistemas.
De acuerdo con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), en México existen ecosistemas de gran belleza, que acuñan una gran riqueza en biodiversidad, entre ellos los bosques relictos.
Éstos son vestigios de territorios vegetales, cuya historia se remonta a millones de años; han sobrevivido a los cambios y son muestra de cómo era la vegetación en grandes extensiones, cuando las condiciones ambientales eran distintas.
Abunda que un bosque relicto, es el que resulta un remanente de otro mucho más amplio que ha perdido gran parte de su superficie, es decir, lo que queda de una vegetación abundante.
Detalla que son el hábitat de una amplia variedad de especies de flora y fauna, algunas en riesgo de desaparecer como orquídeas, salamandras, pumas, murciélagos e insectos, todos esenciales para la salud de los ecosistemas.
Dichos bosques brindan abundantes servicios ambientales como aire puro, belleza del paisaje, plantas medicinales, hongos comestibles, agua de manantiales y fauna silvestre.
Además, previenen la erosión del suelo y contribuyen a la filtración de aguas de lluvia a los depósitos subterráneos, albergan arboles de especies amenazadas o de distribución restringida, y se consideran reservas de material genético para la restauración y rehabilitación de otras áreas deforestadas, ya que son bancos de semillas.
Los árboles en estos ecosistemas devuelven el agua del suelo a la atmósfera, crean un manto que amortigua la violencia de las lluvias y protege los suelos de la erosión, “son una de las piedras angulares del equilibrio climático del cual dependemos todos, es decir, de todo lo que vive en la Tierra”.
Por ello, con el fin de crear conciencia sobre la importancia de conservar los bosques, en la capital del país se llevarán a cabo diversas actividades a lo largo del mes, acciones a las que se sumarán los bosques de Chapultepec y el de San Juan de Aragón, entre otros.