La lucha libre es un deporte rodeado de picardía que refleja lo apasionados que somos siempre los mexicanos. Lo observamos desde los luchadores que se encargan de ofrecer un gran espectáculo, hasta los asistentes que gozan de la euforia y hazaña de cada pelea.
Este deporte llegó a nuestro país desde 1933 gracias a Salvador Lutteroth González, padre de la lucha mexicana. Decidió forjar esta disciplina con luchadores mexicanos a raíz de presenciar funciones en El Paso, Texas. Ese mismo año fundó la Empresa Mexicana de Lucha Libre (EMLL), conocida actualmente como el Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL). También dio pie a la Arena Coliseo, el primer recinto de la lucha en 1943.
Las primeras presentaciones tuvieron lugar en la Arena México, un espacio pequeño que hoy forma parte del estacionamiento del actual recinto de la Doctores. La afición creció rápidamente y exigían más espectáculos de este tipo. Debido a esto, Salvador Lutteroth se aventuró a cerrar y remodelar el lugar que se convirtió en la catedral de la lucha libre, inaugurándose un viernes 27 de abril de 1956.
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Seres comunes en la vida diaria, gladiadores en la arena
No podemos dejar de hablar de una buena pelea si no incluye las características máscaras que distinguen a este deporte. En 1934 se presentó el primer luchador enmascarado que quería ocultar su identidad y así surgió la idea de que cada peleador tuviera una personalidad alterna y llegara a convertirse en leyenda. Así se fue forjando el estilo y variedad a las icónicas máscaras.
Lo que hace apasionante cada espectáculo es cuando combaten máscara contra caballera. Esa apuesta implica que se están jugando su propia identidad o aquello que los ha hecho importantes y reconocidos.
La época dorada de la lucha libre fue de los años cincuenta a los setentas. Dio paso a grandes leyendas como: El Santo, Blue Demon, Mil Máscaras, El Cavernario Galindo, el Rayo de Jalisco, Huracán Ramírez, René Guajardo, Kalorf Lagarde, Dr. Wagner y varios más que han trascendido con el tiempo.
Una tradición legendaria
La lucha libre mexicana está de manteles largos. Cada época alberga diversos personajes que se convierten en los favoritos de niñas y niños. Familias enteras se dan cita para ver a su gladiador favorito, ya sea Técnico o Rudo. Es por eso que este próximo 14 de septiembre se llevará acabo la Magna Función por su aniversario número 85 en la Arena México. Habrá lucha estelar de cabellera contra cabellera, trepidante duelo semifinal, campeonato mundial de tríos y tres peleas más. Checa la cartelera aquí.
Cabe destacar que por este aniversario a finales del año pasado el CMLL publicó el libro: 85 años de lucha libre. A lo largo de 329 páginas nos muestra toda la historia de este deporte, que forma parte de nuestra cultura popular y que este año paso a ser Patrimonio Cultural Intangible.