A partir de este próximo 3 de marzo, la UNAM tendrá un nuevo profesor. Su nombre es Matías Alanís, de 28 años de edad y tiene encefalopatía atetoide. Es decir, parálisis cerebral. Este padecimiento le impide controlar sus movimientos y le dificulta el habla. También sufre de una elevada miopía que disminuye en gran medida su visión.
Sin embargo, estos impedimentos físicos no han frustrado sus sueños ni su brillantez. Tampoco limitan su desarrollo profesional. Pues gracias a su tenacidad y determinación, se graduó de la carrera de Ciencias Políticas y Administración Pública. Y ahora, tras enviar su currículum a la UNAM, firmó el contrato como docente de la materia Sociedad y Estado en México II, en esa misma carrera.
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¡Un ejemplo de perseverancia!
Estudió desde Guadalajara bajo el Sistema Universidad Abierta y Educación a Distancia (SUAyED) de la UNAM. Logró cubrir en tiempo y forma todos los créditos establecidos por el plan de estudios. Terminó su tesis “El sistema político mexicano: sus principales mecanismos de preservación 1968-1994”. ¡Y se graduó con mención honorífica!
Para realizar sus tareas y estudiar instaló dos softwares en su computadora y en su silla de ruedas. Uno es Jaws, que convierte imagen en texto. Y el otro Open book, que lee los textos para que los pueda escuchar. Por supuesto, el apoyo de su madre fue imprescindible. Ella fue su guía y asistente para darle forma a los trabajos.
“Un pequeño paso para mí, pero un gran paso para la inclusión” escribió en su Facebook.
Esta contratación lo tiene muy satisfecho y contento. Para él es una muestra de que las personas con discapacidad pueden desarrollarse laboralmente. Además, él se siente capaz de orientar a sus alumnos porque tiene los conocimientos y la inteligencia necesarios.
Desde que estaba estudiando la carrera, supo que ser profesor a distancia era una gran opción y oportunidad para él. Así que se preparó y ya está listo para comenzar.
El ahora profesor de la máxima casa de estudios, Matías Alanís, vino a probarnos que los límites están en la mente y que la inclusión en México es posible.