A dos horas y media de la CDMX, en un pueblito mágico de Tlaxcala llamado Huamantla, durante el mes de agosto, se lleva a cabo una fiesta tan grande que nadie pega los ojos en toda la noche. Esta celebración es llamada ‘La noche que nadie duerme’.
El evento forma parte de la Feria de Huamantla y se celebra desde hace muchos años. Tiene que ver con el sincretismo cultural y religioso de la región. En la Feria de Huamantla se dan lugar diferentes actividades divertidas y atractivas para todos.
Para los que les gusta la adrenalina y la velocidad está la Carrera de Carcachas (este año se llevó a cabo la 47ª edición), participan autos de varios modelos. También está la Carrera de Burros con finales de fotografía.
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El policromático y aromático Desfile de Flores es una tradición que se realiza desde la época prehispánica para venerar a la diosa de las flores, el amor, la belleza y las artes en la cultura otomí, Xochiquetzalli. Aquí dejan un dulce rastro de flores los carros alegóricos, quienes las van repartiendo a toda persona que se encuentran.
Venerando a la patrona de Huamantla
La mera mera celebración es el día de la Virgen de la Caridad, patrona del pueblo. Es cuando ocurre la ‘Noche que nadie duerme’ y no precisamente porque estén todo el tiempo rezando o cantando. Hay muchas atracciones también: fuegos artificiales, juegos mecánicos, música y baile, rica comida típica, pulque, venta de artesanías y más.
Los habitantes de Huamantla y los turistas se juntan el día 14 para la procesión de esta virgen. Sale de la basílica donde pertenece y recorre las calles durante toda la noche hasta la mañana del día siguiente. La procesión va siguiendo un camino hecho por la misma gente del pueblo. Es elaborado con aserrín de colores, semillas, polvos de ciertos materiales de construcción y flores. Todas forman espectaculares diseños para homenajear y agradecerle por tener salud y prosperidad. También agradecen por todos los favores obtenidos y por su protección.
Los detalles de la mega alfombra son impresionantes. Sus patrones, su perfecta armonía, ¡son toda una obra de arte que se acaba al amanecer! El último día de la feria se lleva a cabo ‘La Huamantlada’ en la que se sueltan toros para que corran por las calles entre la gente.
La Feria de Huamantla es un acontecimiento tan importante porque junta la fe de un pueblo con la belleza cultural para ofrecer una hermosa tradición sin igual.