Bordadores de San Nicolás, diseños que recorren el mundo

En la Sierra Otomí-Tepehua de Hidalgo, a través de hilos de colores que entretejen frutas, pájaros, ríos y mitos. Los artesanos se han dedicado por más 75 años a la creación de los famosos tenangos.

Por si te lo perdiste: ‘Cazuelas de barro, esplendor de la gran tradición alfarera de México’

Con diferentes matices que combinan tradición y modernidad, las y los bordadores de San Nicolás generan piezas únicas. Las cuales merecen todo nuestro reconocimiento.

Sabías que

Esta tradición bordadora nació en la década de los sesenta en respuesta a una crisis laboral y económica que hubo en la zona. La inspiración para estos bellos bordados la encontraron en las pinturas rupestres de la cueva del Cerro del Brujo y El Cirio.

Bordados que rompen fronteras y estereotipos

Con una población menor a los tres mil habitantes, las mujeres empezaron a dedicarse a esta labor y poco a poco fueron sumándose los hombres. Estos comenzaron a hacer del bordado su forma de vida. Rompiendo así los prejuicios y estereotipos que permean en este oficio.

Uno de estos bordadores es Ezequiel Vicente José. Maestro bordador que ha colaborado con la famosa marca parisina Hermès.

Juntos confeccionaron un pañuelo titulado “El encuentro del hombre con la naturaleza”. El cual tardó ¡tres años en realizarse!

Las ganancias de este bello proyecto fueron destinadas a la comunidad y la compra del diseño. El artesano permitió que se instalara una escuela en la comunidad de San Pedro Grande.

Sin embargo, estos artesanos no siempre tienen el reconocimiento que merecen. Incluso, muchos de sus hermosos diseños han sido plagiados por múltiples marcas.

Tal fue el caso del artesano Oliver Teodoro y el plagio a sus bordados por la cadena de ropa Inditex- quienes reconocieron el robo, pero hasta la fecha no le han entregado ninguna remuneración-.

Desde muy pequeño, Oliver Teodoro comenzó a bordar gracias a las enseñanzas de su madre y su mayor sueño es estudiar diseño de modas.

Sus creaciones combinan la tradición otomí con las tendencias actuales en la moda.

Desde suéteres, playeras, tenis hasta ¡vestidos de novia! Los diseños de estos bordadores han dado la vuelta al mundo.