Amatenango del Valle, pueblo de alfarería prehispánica

Amatenango del Valle es un pueblo ubicado en la zona central del estado de Chiapas. Su superficie está conformada por terrenos montañosos y abundante vegetación. Su nombre viene del náhuatl y significa “lugar de amates”. Esta población es de origen tzeltal y es reconocida por su alfarería que, hasta nuestros días, utiliza técnicas prehispánicas.

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Entre tzeltzales y mexicas

Los primeros asentamientos en la región se dieron durante la época prehispánica. Primero los tzeltales, que más tarde serían invadidos por los mexicas en el año 1486. Durante el siglo XVI, los misioneros le pusieron el nombre de San Francisco. No obstante, luego de una sublevación en el siglo XVIII, comenzó a conocerse como Amatenango.

Este municipio está rodeado por bosque de pino-encino. Pero también, existen otras especies de árboles como ciprés, sabino y roble, entre otros. La fauna que habita es abundante, entre los que destaca el murciélago, la ardilla voladora, el jabalí, el venado y el gavilán.

Las mujeres de Amatenango del Valle se caracterizan por su vestimenta típica de falda azul o roja, huipil blanco con bordados en rojo y amarillo. Son ellas precisamente, las artesanas responsables de las ollas, cántaros, tinajas, macetas y figuras zoomorfas, que hacen famoso a este poblado.

La bella tradición de Amatenango del Valle

La alfarería es una tradición que ha pasado de generación en generación en Amatenango, motivo por el que aún se conservan técnicas ancestrales. Todo nace del arte de mezclar tierra y agua. Después las piezas de barro son moldeadas a mano. Y, posteriormente, se secan y se cuecen con leña a cielo abierto. Tal como se hacía en la época prehispánica.

Amatenango del Valle se encuentra a unos 25 kilómetros de Rancho Nuevo, Chiapas, si tomas la carretera federal 190 con dirección a Comitán. Cabe mencionar que debido a los usos y costumbres de este pueblo no se permite tomar fotografías a las artesanas, ni a la iglesia.

Si deseas tomar alguna fotografía tienes que pedir autorización previamente. Si visitas Amatenango del Valle, podrás encontrar algunos vestigios arqueológicos. Así como los restos de la iglesia de San Francisco de Asís, construida en 1756. Te recomendamos respetar los usos y costumbres de los habitantes para que tu visita no cause problemas.