Si tú eres de esos chingonazos que para cada chingadera que dicen, utilizan la palabra chingón y su chingamadral de derivados. Te tenemos una noticia chingona. Editorial Algarabía puso hace un chingo de tiempo en nuestras manos una chingonería de libro llamado ‘El Chingonario’. Donde podrás conocer, a través de sus 192 páginas, un chingo de variaciones de este verbo chingón.
Cada una de estas variaciones contiene una explicación chingona del contexto en el que debe ser utilizado. Todas chingonamente acomodadas en orden alfabético y obvio, con ejemplos de su utilización en esta chinguiza del día a día que llamamos vida cotidiana, los cuales te harán sentir un chingo y dos montones de alegría y soltarás un chinguero de risas.
Remedio chingón
¿Estás hasta la chingada de leer cosas que no te llenan el espíritu o vives hasta casa de la chingada y buscas pasar un rato muy chingón en el trasporte público leyendo algo ameno? ‘El chingonario’ es el remedio chingón para mandar a la chingada todo ese estrés y evitar agarrarte a chingadazos con el primer individuo que se sienta muy chingoncito o que esté de chingaquedito contigo. Además reforzarás tu vasto léxico y tendrás un chingo de habilidad para que te chingues a tus amigos.
Tal y como lo dice Victoria García Jolly en su chingonada de introducción del libro: “es un hecho que el mexicano ha logrado ampliar su léxico gracias a este verbo, pero a la vez, lo ha reducido por sustituir todo tipo de palabras por estas chingaderas. Y aunque el español se chingue, lo cierto es que tras proferir un ‘jijo de la chingada’ uno se siente pleno, relajado y con la firme convicción de haber dicho y expresado sus sentimientos”
¿Apoco no se siente bien chingón mandar a la chingada a alguien de vez en cuando? Con este libro podrás hacerlo con estilo. Ahora te preguntarás: ¿dónde chingados lo venden o con quíén chingados lo consigo? Bueno, pues este libro está disponible en casi todas las chingadas librerías de renombre en el país o en tiendas en línea. Y para que siempre lo cargues contigo y no te lleve la chingada, existe también una versión de bolsillo para que no digas que te chingaron el día.
Ahora sí, me voy a la chingada.
Fotos: @Chingonario