La Torre Reforma, ubicada en Paseo de la Reforma, en la CDMX. Es reconocida como el rascacielos más innovador del mundo con el International Highrise Award 2018, uno de los premios más importantes de la arquitectura. Y lo mejor, fue construida por Benjamín Romano, ¡un arquitecto mexicano!
Edificio ecológico
Esta Torre, mide 246 metros de altura, ¡es el más alto de toda la ciudad! Además, cuenta con la más alta certificación de Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental, el LEED Platino. Debido a que su diseño inteligente ahorra 25% más de energía que otros edificios de este tipo; y por usar 85% de materiales mexicanos. Lo que evita la contaminación generada al transportar materiales de lugares lejanos a la construcción. Es un edificio ecológico, con estructura innovadora que, sin duda, merecía ganar,. Pues resolvió los retos que implica construir un edificio en la Ciudad de México.
Compitió con más de mil rascacielos de otros países, construidos entre 2016 y 2017. De los cuales, sólo 36 proyectos de 15 países fueron nominados por el Deutsches Architekturmuseum. Después fueron 5 los finalistas junto con la Torre Reforma: el MahaNakhon, de Bangkok, Tailandia; el Beirut Terraces, de Beirut, Líbano. El Chaoyang Park Plaza, de Beijing China; y el Oasia Hotel Downtown, de Singapur. Finalmente, por unanimidad, el gran rascacielos mexicano fue el ganador.
Benjamín Romano fue el arquitecto de tan maravillosa estructura, y recibió su premio en la Paulskirche de Frankfurt, en Alemania, este jueves 1 de noviembre. El jurado estuvo conformado por ingenieros estructurales, arquitectos expertos y especialistas en desarrollo inmobiliario. Quienes, para tomar una decisión, consideraron cómo contribuye el edificio al tejido de la ciudad y la comunidad, el concepto general y estructural, las cualidades estructurales. Así como el aspecto cultural de la construcción.
Seguridad, neogótico y norvatividad
La Torre Reforma cumple con tres aspectos muy importantes, con las especificaciones de seguridad al ser un edificio en una zona sísmica. El rescate de la casona neogótica de 1929 desde la que cuelga y con toda la normatividad actual.
Un rascacielos en la Ciudad de México podría parecer una locura, pero el ingenio de Benjamín Romero, sobresalió por su capacidad de solucionar problemas y de vencer todo tipo de retos arquitectónicos. Como todo buen arquitecto, tomó en cuenta el ámbito financiero, la estructura ideal, el medio ambiente. Y por supuesto, las normativas. Porque no sólo es cuestión de que se vea bien, hay mucho detrás de la construcción de un gran edificio.
La Torre destaca del resto por su diseño tan original, innovador y extraordinario que da un aire futurista a la CDMX con su forma triangular.
El Premio Internacional Highrise (IHA) se realiza cada dos años. Empezó a iniciativa de la Ciudad de Frankfurt, el Deutsches Architekturmuseum y el DekaBank en el 2003. Pero el premio se entregó en el 2004 por primera vez. El propósito es premiar a los mejores arquitectos y desarrolladores cuyos edificios midan más de 100 metros de altura y se hayan terminado en los últimos dos años.
Si no has visto este impresionante rascacielos tienes que conocerlo y sorpréndete con su originalidad y grandeza. Para los mexicanos no hay reto que no podamos vencer, y la Torre Reforma es prueba de ello.
Fotos: Torre Reforma