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Tlayacapan, el resplandor de la arquitectura colonial

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Nada sana más rápido del estrés citadino que la convivencia con nuestros paisajes. Ejemplo de esto es el hermoso estado de Morelos. Más allá de Tepoztlán, este bello estado tiene otros pueblos encantadores que tienes que conocer, tal es el caso de Tlayacapan.

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Sobre la punta de la Tierra

Tlayacapan es un Pueblo Mágico que seguro te deleitará con sus artesanías, comida y diversas actividades.

Su nombre viene del náhuatl Tlal-li, ‘Tierra’, Yaka-tl, ‘Naríz, punta, término’ y Pan, ‘término locativo’. Tiene varios significados, algunos de ellos son: “Sobre la punta de la tierra”, “Lugar de los límites o Linderos” o “La nariz de la tierra”.

El pasado de Tlayacapan

Los primeros en habitar esta tierra fueron los Olmecas. Según los registros arqueológicos, en la zona se encontraron diversas vasijas y figurillas con los rasgos de esta antigua cultura.

Ex convento de San Juan Bautista, Tlayacapan
Ex-convento de San Juan Bautista.

Además, en la época prehispánica este lugar fue clave para los intercambios comerciales que se daban con otros pueblos, pues Tlayacapan era un paso obligado del camino de Tenochtitlán.

Tiempo después, Tlayacapan fue sometido por Hernán Cortés y todo su ejército colonizador. En 1539, cuando la zona se evangelizó por completo, el virrey Don Antonio de Mendoza lo dotó de tierras en 1786. Pero hasta la Revolución, Tlayacapan pudo tomar nuevamente el poder de sus tierras.

Arquitectura, su principal fortaleza

Actualmente este bello estado goza de una arquitectura religiosa inigualable. De hecho, la UNESCO en 1996 declaró al Ex-convento de San Juan Bautista como Patrimonio de la Humanidad.

Este museo muestra los frescos que se plasmaron desde sus inicios. Y, gracias a ellos conocemos las formas de representación que los Padres Agustinos usaron para evangelizar el Municipio. Aunque, actualmente, sigue en rehabilitación porque sufrió graves daños en el sismo de 2017.

Arquitectura de Tlayacapan, Morelos
Ex-hacienda de San Nicolás.

Las haciendas de Tlayacapan son otros grandes atractivos. Una de ellas es la Ex-hacienda de San Nicolás, que perteneció a Hernán Cortés en el año de 1522. Se dice que los Agustinos tomaron posesión del edificio, luego lo recuperó un pariente de Cortés y, finalmente, el gobierno nacional.

Por otro lado, sus paisajes son dignos de admirar, pues aquí la vida de la gente corre de manera distinta. Sus hermosas casas con balcones blancos y calles plagadas de flores resaltan todavía más el esplendor de Tlayacapan.

Fotos: Visit Mexico y México Desconocido