Salsa ranchera: además de sencilla, combina con todo

La salsa ranchera puede combinarse casi con cualquier platillo; y es de muy fácil preparación

En México hay casi tantas salsas como lugares. Pico de gallo, salsa macha, salsa verde, guacamole y hasta variaciones de cada una de ellas según la región. Es un elemento esencial en las mesas de cada familia mexicana. Es por eso que hoy te traemos la receta de la salsa ranchera.

Aunque originalmente era utilizada para la preparación de los huevos rancheros, pronto se popularizó su uso como acompañamiento de otros platillos. Las combinaciones más comunes incluyen principalmente carnes o pollo, aunque también hay quien se la pone hasta a las hamburguesas. De cualquier modo, es una gran opción para darle un toque diferente a la comida.

Para prepararla, necesitarás:

3 tazas de tomates previamente pelados y picados

2 dientes de ajo picados

1/2 taza de cebolla picada

1 chile serrano o jalapeño, picado y sin semillas

1 cucharada de orégano

2 cucharadas de aceite vegetal

Si lo deseas, también sal, al gusto.

Para preparar, debes calentar el aceite en una cacerola. Después, cuando pueda repartirse con facilidad por la superficie; añade la cebolla, el ajo y el chile. Deben revolverse constantemente durante 3 minutos, sin que se doren del todo.

Lo siguiente será añadir los tomates, con el fuego un poco más bajo. Se dejan ahí durante 5 minutos, revolviendo ocasionalmente.

Una vez que todo se haya ablandado, se agregan el orégano y la sal, de ser necesaria. Tras revolver todo hasta que esté bien incorporado, la salsa debe cocinarse por cinco minutos más.

Existe un debate sobre si la salsa debe licuarse una vez se enfría. Hay quienes aseguran que la textura es lo que le da a la salsa ranchera esa versatilidad tan característica. Otros afirman que si no se licúa no está completa. Como sea que decidas prepararla, esperamos que la disfrutes.

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