¡Cuidado!
Sabemos que quizás seas una de las muchas personas que consumen bebidas energéticas.
Ya sea antes de entrenar tu deporte favorito o simplemente para comenzar tu día.
Sin embargo, debes de tener en cuenta los daños que le estás haciendo a tu cuerpo con el consumo de estas bebidas energéticas.
Empecemos por el principio.
Se denomina bebida energética al producto artificial que está compuesto por múltiples sustancias estimulantes que generan en el consumidor un “efecto energético” y por lo tanto una “regeneración” ante la fatiga y cansancio.
Bien, como tal, estas bebidas, no contienen sustancias naturales que proporcionen la energía necesaria, como tú lo pensarías.
Son una serie de sustancias que tienen una hiperestimulación en el sistema nervioso, que causan signos como alerta, excitación, ansiedad e insomnio.
Evidentemente, el consumo esporádico de estas bebidas no representa un gran problema en la salud, hay que tener un control estricto.
Dichas bebidas “energizantes” contienen altas cantidades de cafeína, azúcar y otros ingredientes estimulantes, lo que puede tener efectos deshidratantes en el cuerpo.
Además, las bebidas energizantes pueden causar una sobrecarga de cafeína y otros estimulantes, lo que puede tener efectos negativos en la salud a largo plazo, incluyendo aumento de la presión arterial, palpitaciones cardíacas, insomnio y ansiedad.
En los últimos tiempos, los jóvenes, en su mayoría, han combinado estas bebidas con alcohol.
Dichas mezclas, pueden causar daños aún más graves a la salud, aún en una sola dosis.
De acuerdo a testimonios, el combinar el alcohol con estas bebidas, causa de manera inmediata una exaltación no controlable, fatiga, mareos y hasta desmayos.
Por el contrario, te recomendamos obtener energía de otras maneras naturalmente, como las frutas o los electrolitos orales.