En nuestro país existe una gran variedad de flores y plantas comestibles; que incluso han llegado a formar parte de ciertas recetas típicas
¿Sabías que, en nuestro país, se tienen registradas más de 100 flores comestibles? Algunas de ellas se utilizan para acentuar el sabor de ciertos ingredientes; para aromatizar bebidas, o sencillamente para decorar. Otras más, por su valor nutricional y la facilidad con que se encuentran, se convirtieron en protagonistas de sus propias recetas, convirtiendo a las flores y plantas comestibles en toda una rama de la gastronomía mexicana. Algunas de ellas son:
- Lavanda:
Conocidas por su aroma, la lavanda se suele sembrar en los jardines para ahuyentar a las hormigas. Sin embargo, puede usarse para hacer té, condimentar ensaladas y preparar panes o galletas. - Flor de maguey:
Es también conocida como gualumbo o quiote. Se suele usar para preparar ensaladas, como relleno de gorditas, y hasta a la mexicana. Algunos lo consideran un sustituto de la carne; y por lo difícil que es conseguirla, se clasifica también como uno de los manjares de la gastronomía mexicana.
- Huauzontle:
muchos dicen que parecen arbolitos; pues sus flores son diminutas y redondas. Generalmente se preparan capeados; aunque también se llegan a combinar con queso, pollo, mole, huevo y casi cualquier ingrediente típico nacional. Solo se dan entre mayo y octubre. - Rosas:
Aunque no son endémicas de México; es común encontrarlas como un ingrediente en bebidas y en postres. Sirve como aromatizante, pues le da un toque único a cualquier preparación. También se preparan helados con ellas; e incluso se cristalizan para comer los pétalos. Por supuesto, son consideradas también un ingrediente de lujo; pues para poder consumirse deben estar libres de insecticidas.
Y tú, ¿has probado alguna?