En Quintana Roo hay un ecosistema que sorprende por sus características únicas en la Península de Yucatán. Se trata de El Corchal, y es que entre las aguas crecen árboles de corcho, cuyas raíces son de los más livianas. Por lo mismo, cuando hay temporada de huracanes, la selva completa se mueve de lugar.
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La selva de corcho, un raro ecosistema
Sin duda, este humedal es un cuadro pintado por la naturaleza con una magia especial. A la comunidad donde se ubica la selva, también se le conoce como “El pueblo del árbol milenario”.
Se dice algunos de sus árboles tienen alrededor de 800 años, pero lo que llama la atención es que son árboles de corcho. Como sus raíces son livianas, flotan y se mueven de lugar. Por esta razón, se llegaron a usar como flotadores para redes de pesca.
Por sus ramas crecen orquídeas, con lo que da más color al escenario natural. Además, hay partes con jardines de nenúfares, planta acuática de hojas grandes con una flor blanca, que flota sobre las aguas.
Entre las especies animales que ahí viven están los venados, jabalíes, monos, aves, reptiles y jaguares.
Actividades en El Corchal
Si quieres ir y conocer este lugar, puedes acampar cerca del muelle. Eso sí, lleva suficiente agua y repelente.
De igual forma, hay espacios para aventarte de la tirolesa o practicar rappel. Por otro lado, hay diferentes paquetes especiales para recorrer la zona. También se puede practicar kayak o dar caminatas mientras disfrutas del paisaje y los sonidos de la naturaleza.
Pero es importante recordar no tirar basura y cuidarlo, ya que puedes dañar el ecosistema, pues es muy delicado.
Para llegar a El Corchal, puedes tomar el autobús de Mérida o Cancún con dirección a Chiquilá. De ahí pasas Kantunilkín para llegar a la Comunidad de Solferino, al norte de Quintana Roo.
¡El Corchal te espera para vivir tu próxima gran aventura!
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