Desde 1988 cada 31 de mayo celebramos el Día Mundial sin Tabaco. Esta campaña fue creada por la Organización Mundial de la Salud y sus diferentes asociados para concientizar sobre los efectos nocivos y mortales del consumo de tabaco y la exposición al humo.
La nicotina, una sustancia adictiva
Desde hace décadas se han implementado distintas legislaciones que limitan el consumo de tabaco.
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Cada año se realizan múltiples campañas para concientizar a la población sobre el deterioro a la salud que genera este hábito.
Incluso en cada cajetilla vienen imágenes que advierten los daños que su consumo puede causar.
Pero, pese a todo la información que tenemos sobre los problemas que conlleva ser fumador aún seguimos consumiéndolos. ¿A qué se debe esto? La respuesta: la nicotina.
Este compuesto de origen orgánico alcaloide que, desde el punto de vista químico es un veneno, es usado también como insecticida. Y en pequeñas cantidades esta sustancia actúa como estimulante. Por esta razón es tan adictiva.
Sabías que
En la Ciudad de México 1.9 millones de habitantes entre los 12 a los 65 años son fumadores, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Y cerca de 180 personas al día, al menos en México, mueren por fumar.
Se estima que para el próximo año, el tabaco será la causa del 12% de todas las muertes a nivel mundial. Teniendo un porcentaje mayor a las muertes causadas por la tuberculosis, accidentes automovilísticos y VIH/SIDA.
Un hábito nocivo para todos
El tabaco mata al año a más de 7 millones de personas al año, de este número 6 millones son consumidores directos y cerca de 890 mil personas son fumadores indirectos. Los fumadores indirectos son aquellos que inhalan el humo ajeno.
El humo, tanto para los fumadores directos como los indirectos, contiene más de 4000 productos químicos, de estos 250 son nocivos y más de 50 causan cáncer.
Las personas que inhalan el humo ajeno son propensas a padecer trastornos cardiovasculares y respiratorios. Esto puede derivar en cáncer de pulmón y coronariopatías.
En el caso específico de los niños, ellos no sólo pueden presentar estas enfermedades sino también la muerte.
En el 2004, la OMS señaló que el 28% de defunciones de infantes se debieron a la exposición al tabaco.
Y no sólo te afecta a ti y a quienes te rodean, sino también al ¡medio ambiente! Al día se desechan 10 mil millones de cigarrillos.
Las colillas del cigarro equivalen al 40% de los residuos en actividades de limpieza costera y urbana.
Y, según informes de la organización Ocean Conservacy, una colilla de cigarro puede contaminar hasta ¡50 litros de agua potable!
Y eso no es todo, los fumadores producen 225 mil toneladas de dióxido de carbono al año y para producir 300 cigarros, sin contar los árboles utilizados en la elaboración del papel del cigarrillo y cajetillas, se talan 8 árboles.
Así que la próxima vez que quieras un cigarro, piénsalo dos veces.