Balché, la bebida embriagante sagrada de los mayas

El balché es una bebida alcohólica ceremonial de origen prehispánico, principalmente usada por los mayas y muy común entre las culturas del sureste de México.

Esta bebida es una clase de hidromiel y se elabora gracias a la fermentación de la leguminosa que nace del árbol también llamado balché. Este coloso natural puede llegar a medir hasta 18 m de altura. Tiene flores de color violeta y sus frutos son vainas oblongas y aplanadas de color marrón claro cuando están maduras. Este árbol es considerado sagrado por darles esta bebida ancestral, por representar vida y fertilidad. Además es reconocido por ser una especie endémica de la Península de Yucatán.

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El licor de balché se prepara en un bebero o canoa con agua ‘virgen’, es decir, recién colectada de algún cenote. Se ponen las tiras hervidas de la corteza del árbol para que suelte esencia y color. Se cubre el brebaje con hojas de palma o plátano y se deja fermentar entre 2 a 3 días, momento en elque está listo para ser bebido. El toque dulce se le da agregándole miel de abeja maya y es servido en jícaras para su deleite.

Bebida mística y ancestral

La bebida de balché se sigue empleando en diversos rituales curativos. También se ha descrito que el licor tiene cierto efecto laxante; por lo tanto, es perfecto para lograr la purificación física y espiritual, indispensable para alcanzar la comunicación con los dioses. Esta misma comunicación también se lograba con sus efectos embriagantes. Esto les permitía pasar a un estado sagrado, trascender a otras dimensiones y a un profundo cambio de conciencia.

La bebida también se presentaba como ofrenda. La deidad relacionada con el licor de balché es Acán, dios del vino. Los lacandones se refieren al balché como ‘El Señor Balché’. Lo identifican con Bohr o Bol, el dios de la borrachera.